Vecinos de villas porteñas iniciaron hoy la segunda semana de campamento con huelga de hambre frente al Obelisco, en el centro porteño, con el objetivo de reclamarle a Mauricio Macri la urbanización de los asentamientos y la declaración de la emergencia habitacional en la Ciudad.
Los integrantes de la Corriente Villera Independiente (CVI) expresaron en un comunicado de prensa que "organizaciones, partidos, sindicatos, estudiantes, artistas, personalidades y un sinfín de personas han manifestado su solidaridad y apoyo" con los manifestantes, "pero aún no ha habido ningún encuentro con los funcionarios" de la Ciudad de Buenos Aires.
"La huelga de hambre sigue por tiempo indeterminado: este acto de amor que han encarado los huelguistas sigue hasta que tengamos soluciones concretas a nuestras necesidades. Basta de hacer negocios con los pobres", manifestaron.
Entre las actividades organizadas por la agrupación para esta semana se incluye este lunes a las 16 un homenaje a los villeros desaparecidos.
A lo largo de la semana vecinos de unas veinte villas porteñas recolectaron firmas en adhesión al reclamo de urbanización de las villas y entregaron volantes para "visibilizar" la problemática de los asentamientos porteños.
La CVI exige al gobierno de Macri que declare la emergencia habitacional, socioambiental, sociosanitaria y socioeducativa en las villas, y reclama la urbanización con radicación de los asentamientos. Asimismo, demanda una auditoría de las cooperativas y empresas que trabajan en los barrios, la regulación de alquileres y subsidios habitacionales, y que "no se criminalice la pobreza".
La CVI denunció, además, que la administración macrista pretende un "modelo de dos ciudades, donde la ciudad rica excluye a los pobres" y criticó la "evidente falta de voluntad política" para resolver la problemática de la vivienda" en el distrito.