La Corte Suprema de Justicia desestimó un recurso de queja presentado por un vecino porteño en relación al uso de armas no letales. El tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de Buenos Aires había denegado el amparo que impedía a la Policía Metropolitana la compra de pistolas eléctricas Taser.
El recurso que impedía al gobierno de la Ciudad concretar la compra de este armamento argumentaba que son "de extrema peligrosidad al punto de constituir una tortura y, por lo tanto, comprometía sus derechos personales -y de los habitantes de la ciudad- a la vida, la salud y la integridad física".
Luego de diferentes presentaciones judiciales desde 2010 a la actualidad el gobierno estaría habilitado finalmente a realizar la compra. Dado que la licitación nunca llegó a concretarse, en virtud de la polémica, el uso de las Taser ya no es parte de la agenda de seguridad.
Naciones Unidas y Amnistía Internacional se pronunciaron en contra del uso de estas pistolas eléctricas porque ha habido 600 muertes en Estados Unidos por su uso, y en Reino Unido se detectó su utilización contra menores.