Alejando Granados, el flamante vicepresidente del Organismo Regulador del Sistema Nacional de Aeropuertos (ORSNA) pertenece a una familia de larga tradición peronista en el conurbano bonaerense, que militó primero en el menemismo, luego en el duhaldismo y terminó junto a los Kirchner.
Su padre, del mismo nombre, gobierna el partido bonaerense de Ezeiza desde 1995, cuando su municipio se separó de Esteban Echeverría, y mantiene el cargo hasta hoy. Entonces se lo consideraba uno de los más fervorosos defensores de Carlos Saúl Menem, ya que el Presidente le había concedido la bendición para dividir los distritos.
La relación con el menemismo iba más allá: los Granados son dueños de El Mangrullo, una parrilla icónica de Ezeiza, donde se celebraron muchos actos del caudillo riojano. Además, la quinta de Granados fue el lugar donde Menem festejó su victoria en la interna del PJ en 1988 y la reelección de 1995. El ex Presidente solía dormir, comer y jugar al fútbol allí como si fuese su propio hogar.
El Mangrullo fue escenario de reuniones duhaldistas durante unos pocos años. Pero cuando el kirchnerismo arrasó dentro del PJ bonaerense, Granados padre no tardó mucho en asociarse al nuevo líder. "No quiero hablar de lo que Kirchner dice de Menem. Menem le hizo bien a Ezeiza y por eso la gente lo quiere. Pero nosotros adherimos ahora a este proyecto. Estoy donde tengo que estar, al lado del Presidente", proclamaba Granados en 2005, durante un acto de campaña en Ezeiza.
El traspaso de Granados al kirchnerismo también llegó al fútbol. En octubre pasado, Néstor Kirchner jugó un "picado" con Diego Armando Maradona y el escenario fue, una vez más, la quinta de la familia en los bosques de Ezeiza. Incluso participó Gastón Granados, hijo de Alejandro y presidente del club de la B metropolitana Tristán Suárez, el mismo club que antes había presidido su padre. Gastón también mantiene muy buenas relaciones con el actual DT de la Selección Argentina.
El intendente de Ezeiza fue uno de los tantos que acompañaron a Néstor Kirchner poniendo "el cuerpo y el nombre" en las candidaturas testimoniales para las elecciones legislativas de 2009. Granados padre iba en la boleta junto a su esposa, Isabel Beatriz Visconti, más conocida como "Dulce Granados", que fue electa diputada provincial por Buenos Aires. Antes, entre 1993 y 2001, Visconti había ocupado el cargo de diputada nacional por el justicialismo.