La disputa está ahora centrada en la Ciudad de Buenos Aires. En este territorio, el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta acaba de ratificar la intención de que el 17 de febrero se inicien las clases presenciales. Esto provoca la resistencia de los gremios y la disputa que escaló esta semana por ahora, parece no terminarse.
Desde el sector docente, el sindicato UTE-Ctera planteó en un comunicado que “el aumento de contagios en la Ciudad de Buenos Aires y la falta de espacios adecuados en los edificios escolares para el desarrollo de actividades sin descuidar la salud, hacen que no estén dadas las condiciones epidemiológicas ni de infraestructura para el retorno a las clases presenciales el 17 de febrero”. Ayer, los casos diarios de coronavirus llegaron a 1.306.
Angélica Graciano, titular de UTE-Ctera, propuso establecer un semáforo epidemiológico para evaluar el regreso a clases, según la cantidad de casos positivos de coronavirus por cada 100.000 habitantes. En octubre del año pasado, el ministerio de Educación nacional había armado un sistema de semáforo para volver a las aulas, pero ahora el ministro de Educación, Nicolás Trotta propone rediscutir de acuerdo al escenario que cada provincia presente.
“Por último, exigimos la implementación inmediata de un esquema de vacunación para el personal docente y no docente y la creación de los cargos que sean necesarios para sostener los probables esquemas mixtos”, afirmó Graciano. La aplicación de las dosis promete ser una de las mayores discusiones durante las próximas semanas.
En tanto, la secretaria gremial de Ctera, Alejandra Bonato, indicó tras la reunión que “el contenido se recupera, pero las vidas no” y remarcó que actualmente se dan “las mismas cifras” de contagios que en junio de 2020. La referente sindical advirtió que “las aulas son muy chicas” y es necesario “invertir en infraestructura”, y afirmó que “aún falta la vacunación” para los docentes.
El secretario adjunto de Ademys, Jorge Adaro, dijo en declaraciones a Télam que el Gobierno porteño “quiere volver a la presencialidad, sin ningún tipo de propuesta que atienda a la realidad” y sostuvo que “siguen planteando que cada maestro tiene que trabajar con grupos de 30” alumnos.
En las últimas horas, los gremialistas también salieron a cuestionar al ex presidente Mauricio Macri, quien dijo que los docentes eran “héroes sin capa” y pidió volver a las aulas.
“Es inadmisible que el ex presidente Mauricio Macri llame ahora a los docentes ‘héroes sin capa’, cuando durante su gestión promovió campañas de desafiliación, de hostigamiento, de persecución y se lamentó por los que tienen que ‘caer’ en la #EscuelaPública”, escribió la titular de FEB, Mirta Petrocini. “Su espacio político persiguió a #docentes con sumarios, insistió reiteradas veces con propuestas salariales ‘superadoras’ que fueron a la baja, cerró escuelas (por ej Islas), bajó presupuesto destinado a Educación y aseguró que los pobres no podían llegar a la Universidad”, recordó la dirigente en las redes sociales.
Se sumó también la secretaria adjunta de Suteba, María Laura Torre: “No tiene vergüenza. Es una provocación a la cual nos tiene acostumbrados, habría que avisarle que las escuelas están trabajando”, dijo.
