Los industriales piden devaluar y Moyano les dice "no"

Devaluar o no devaluar, esa es la cuestión. Como frente a todas las crisis, el tipo de cambio vuelve a ser terreno de debate. En este caso, se enfrentan la Unión Industrial Argentina (UIA) y los empresarios, que quieren un dólar más alto, y los sindicalistas que defienden la postura del Gobierno de mantenerlo en los valores actuales.

Ambas facciones se enfrentarán hoy en la 14º Conferencia Industrial que la UIA celebra en Pilar. La propuesta oficialista será defendida primero por Hugo Moyano, secretario general de la Confederación General del Trabajo (CGT), y luego por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien cerrará el seminario esta tarde.

Ante la crisis financiera global, los industriales argentinos temen por su rentabilidad por varios motivos: la incertidumbre baja el consumo y los lleva a reducir personal. Además, la recesión que ya se desató en Europa y Estados Unidos cerró mercados para los productos asiáticos, que pueden derivar en un vuelco de sus excedentes, a precios más baratos, en nuestro país.

Por eso los empresarios reclaman la devaluación, para aumentar su competitividad en el mundo. "Perdimos una excelente oportunidad cuando se depreciaron todas las monedas de la región", dijo el economista Aldo Ferrer en la Conferencia de la UIA, al diario La Nación, agregando que "en ese momento se tendría que haber fijado en cuatro pesos y después sostenerlo".

Consultado sobre si ese tipo de cambio no disminuiría los salarios, el economista replicó que "no, porque el consumo de los argentinos es mayoritariamente de compre nacional", y que el precio de los alimentor no subirían porque "para eso están las retenciones".

En la misma línea, Carlos Capisano, presidente de la Federación Industrial de Santa Fe, sostuvo que la devaluación no afectaría el poder adquisitivo de los argentinos "porque hay un proceso de recesión y de enfriamiento muy grande. Cerca de Las Parejas hay empresas con venta cero", complementó.

La CGT reconoce la necesidad de que se modifique el tipo de cambio, pero prefiere un aumento más paulatino. Los sindicalistas creen que la devaluación "no hará otra cosa que agravar la situación actual" porque "retraerá el poder de compra y eso impactará sobre el mercado y la economía".

Moyano teme, al igual que los empresarios, por una invasión de productos asiáticos, por lo que pedirá al Gobierno que aumente los controles aduaneros y aplique una política antidumping, informó el diario Ámbito Financiero.

"No vamos a aceptar reducciones salariales como método", expresó ayer la CGT en un comunicado de prensa. Por eso, el líder camionero defenderá el caso del arreglo entre el gremio mecánico (SMATA) y la automotriz General Motors (GM), que acordaron suspensiones rotativas del personal con el pago del 70% de los días no trabajados.

El líder camionero expondrá acompañado de los gobernadores de Chaco, Jorge Capitanich, y Santa Fé, Hermes Binner, además de algunos legisladores kirchneristas. Luego cerrará la conferencia la Presidente.