POLITICA
Kirchner y Sol no asistieron al acto

Los restos de Juan Perón ya descansan en San Vicente

La inhumación de los restos del ex presidente se llevó a cabo en el marco de serios disturbios antes y después del acto. Decenas de manifestantes se enfrentaron en los alrededores del predio, dejando un saldo de cuatro heridos de bala -que el Gobierno de la provincia desmintió- y más de 50 lesionados de distinta consideración.

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Luego de 32 años, y en medio de una multitud de militantes peronistas, los restos del general Juan Domingo Perón fueron inhumados hoy en un mausoleo construido especialmente en la quinta 17 de Octubre de la localidad bonaerense de San Vicente.

El histórico hecho, para los afiliados al Partido Justicialista, se produjo en medio de serios incidentes, que dejaron un saldo inicial de más de 50 heridos, alguno de ellos de bala, según voceros del Hospital Ramón Carrillo de San Vicente. Para el ministro de Seguridad bonaerense, León Arslanián, no hubo tales lesionados con armas de fuego (Ver nota vinculada).

El traslado del féretro del ex presidente había comenzado después de las siete de la mañana. En principio, fue llevado desde el cementerio de la Chacarita rumbo a la sede de la Confederación General del Trabajo, en la calle Azopardo al 800, donde cientos de trabajadores se congregaron para despedirlo con banderas y pancartas alusivas.

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Pasado el mediodía, los restos de Perón partieron desde la sede de la CGT. El ataúd estaba envuelto en una bandera argentina y al salir de la sede sindical estuvo acompañado por un batallón del Regimiento de Granaderos a Caballo, que lo custodia ante los cientos de seguidores que se encontraban en la sede de la calle Azopardo y que arrojaban flores al cajón.

El acto principal en el mausoleo de San Vicente estaba previsto para las 17, pero a raíz de una serie de graves incidentes entre fracciones del gremio de la construcción y de los camioneros, el mismo se retrasó casi una hora y media.

La policía debió utilizar balas de goma, para lograr despejar la zona antes de que arribara el féretro con los restos de Perón.

Tras producirse los disturbios, la cureña que trasladaba los restos del ex presidente llegó a la quinta. Los discursos de despedida al líder del partido estuvieron a cargo del titular de la CGT, Hugo Moyano, el dirigente de las 62 Organizaciones, Gerónimo Venegas, y el ex senador y amigo personal de Perón Antonio Cafiero.

A esa altura, todos sabían que -debido a los disturbios- el presidente Néstor Kirchner y el gobernador bonaerense, Felipe Solá, habían desistido de trasladarse a la ceremonia de San Vicente. Lo mismo ocurrió con el ex presidente Eduardo Duhalde, a quien tampoco se lo vio en el acto.

El primero en subir a escena fue, entonces, Moyano, quien debió esperar para hablar debido a que fue insultado y apedreado por algunos de los manifestantes presentes en el lugar. Por esa razón, sólo se escucharon unas pocas palabras de su discurso en los que pidió no empañar "la fiesta por unos pocos que pretendan ensuciar su figura (por Perón)".

Luego, el secretario general de las 62 Organizaciones peronistas y jefe del Sindicato de Peones Rurales le pidió a la concurrencia escuchar "pacificamente las palabras" de los oradores, mientras en el interior de la quinta de San Vicente continuaban los incidentes.

"Pedimos que escuchemos pacíficamente las palabras que tenemos que decir", pidió Venegas quien agregó que “estamos ante el líder indiscutido del pueblo argentino el teniente General Juan Domingo Perón. Que sus restos descansen en la provincia que lo vio nacer”

Por último, el ex senador Antonio Cafiero afirmó que "acá está el pueblo de Perón, el pueblo, sólo el pueblo", y les dijo a los presentes que el acto debía ser “como el 17 de octubre del ‘45”.

"Descanse en paz, mi General. Descanse para siempre bajo los árboles. Oiga, como siempre, la voz del pueblo, que es la voz de Dios", señaló, con la voz quebrada, el ex funcionario.

“General escuche la voz del pueblo ‘todos unidos triunfaremos y como siempre daremos un grito de corazón: viva Perón, viva Perón’", abundó.

Duhalde también la quiere a Evita. Esta mañana, durante el homenaje realizado en la CGT, el ex presidente Eduardo Duhalde pidió que "en algún momento el general y Evita descansen juntos en San Vicente".

"No tengo ni resentimiento ni nada con ningún compañero, es de esperar que todos los peronistas trabajemos juntos", enfatizó Duhalde al hablar en el homenaje a Perón que se desarrolló en el Salón Felipe Vallese de la central obrera.

Duhalde además recordó: "Perón no estaba donde estaba porque quisiéramos, fue la dictadura que nos obligó a llevarlo allí", en referencia al cementerio de la Chacarita y antes de que el féretro sea trasladado a la Quinta de San Vicente.

Antes, Venegas había dicho que hoy es un "día histórico" porque se recuerda "cuando el pueblo pidió la libertad" del general Perón el 17 de octubre de 1945.

En la misma sintonía, el titular de la CGT, Hugo Moyano, dio inicio al acto donde afirmó que comienza " a cumplirse el deseo de (Juan Domingo) Perón de descansar en la provincia de Buenos Aires".

En el homenaje de esta mañana participaron, además de Duhalde, mentor del traslado de los restos de Perón, su mujer Hilda González de Duhalde, alias "Chiche", Luis Barrionuevo y De la Sota, entre otros.

Durante el homenaje un sacerdote dio un responso ante el féretro que contiene los restos del general, rodeado de políticos, sindicalistas y artistas. El cura exaltó la tarea realizada por Perón y que terminó su responso dándole un beso al cajón, rodeado por la Bandera Argentina y la gorra del ex presidente.

Alrededor del féretro, posado sobre la cureña, estuvieron la diputada Graciela Camaño, el sindicalista de judiciales Julio Piumato, el actor Dady Brieva, el empresario fúnebre Alfredo Péculo, y el periodista peronista Juan Carlos De Renzis, entre otros.