El presidente Mauricio Macri destacó en la cumbre de los líderes del G-20, que se desarrolla en la ciudad china de Hangzhou, que la Argentina dejó atrás "años de populismo" y "el aislacionismo que obstaculizaba" su "integración con el mundo". El mandatario se expidió en favor de un sistema comercial "abierto, inclusivo y fuerte" para potenciar "el impacto positivo de las inversiones" y generar "prosperidad" en la economía mundial.
El mandatario tuvo tres intervenciones en el encuentro y además mantuvo distintas reuniones, entre ellas una bilateral con su par español Mariano Rajoy, al que invitó a reforzar su presencia inversora en la Argentina.
Según se informó oficialmente, Macri remarcó en la cumbre que "en la Argentina ya dejamos atrás el aislacionismo que obstaculizaba nuestra integración con el mundo", consideró que ha impulsado "cambios revolucionarios" y también que el país dejó atrás "años de populismo". "Hemos lanzado también una fuerte lucha contra la corrupción y un programa de energías renovables", aseveró.
La sesión, que se desarrolló en el Centro Internacional de Exposiciones de Hangzhou, también incluyó intervenciones de los presidentes de Francia, Francois Hollande; de Estados Unidos, Barack Obama; de Egipto, Abdel Fattah Al Sisi; de México, Enrique Peña Nieto, y de Turquía, Recep Erdogan. Además, expusieron la canciller federal de Alemania, Angela Merkel, los primeros ministros de Italia, Matteo Renzi; del Reino Unido, Theresa May, y de la India, Narendra Modi, y el presidente del Gobierno de España, Mariano Rajoy, entre otros líderes. De acuerdo a la información oficial, Macri sostuvo que "la Argentina tiene mucho para aportar en la producción de alimentos de calidad".
Al exponer en la cuarta sesión plenaria de la reunión, dedicada al tema "Desarrollo inclusivo e interconectado", Macri destacó también especialmente el papel protagónico que aspira a cumplir la Argentina en la agroindustria. "El mundo enfrenta desafíos de magnitud para poder alimentar a una población de más de 9.000 millones de personas en 2050", sostuvo. "Y aquí la Argentina tiene mucho para aportar, porque producimos alimentos de calidad para más de 400 millones de personas, casi 10 veces nuestra población. Y queremos duplicar la producción en los próximos años", remarcó.
"La Argentina tiene mucho para aportar en la producción de alimentos de calidad", dijo.
También señaló que "el comercio internacional es una condición fundamental para el impulso de la agricultura", pero advirtió que "si queremos erradicar el hambre y la pobreza, debemos eliminar las distorsiones". "Estamos poniendo en marcha el plan de infraestructura más ambicioso de nuestra historia", expresó el jefe de Estado, quien reivindicó un sistema comercial "abierto, inclusivo y fuerte".
Macri se expidió en favor de un sistema comercial "abierto, inclusivo y fuerte" para potenciar "el impacto positivo de las inversiones" y generar "prosperidad" en la economía mundial. Para el mandatario, "la eliminación de los subsidios distorsivos y el acceso transparente a los mercados nos permitirá a los países en desarrollo financiar las necesidades de crecimiento y avanzar en la Agenda de Desarrollo Sostenible 2030".
Asimismo, enfatizó que la Argentina ha dejado atrás "años de populismo" y resaltó: "Hemos hecho cambios revolucionarios".
En cuanto a Rajoy, Macri invitó a España a reforzar su presencia inversora en la Argentina durante la reunión bilateral que mantuvieron ambos jefes de Estado. "Confío en el protagonismo de España. Ya hemos recibido a muchas empresas interesadas en participar e invertir en la Argentina en áreas como la agroindustria o energías renovables", dijo Macri. Según se informó oficialmente, el presidente le manifestó a Rajoy que "las licitaciones ahora son transparentes y pelean en igualdad de condiciones con todo el resto".
Las sospechas sobre la balanza comercial con China y otros países. El diario La Nación consignó que después de la reunión bilateral que mantuvo Macri con su par chino, Xi Jinping, y de los preparativos para el encuentro que hoy mantendrá con el presidente ruso, Vladimir Putin, llamó la atención a los funcionarios argentinos algo que se viene reiterando desde hace tiempo: China aduce que el déficit de la balanza comercial con la Argentina es de US$ 3000 millones. Pero, según las estadísticas de la Aduana, esa cifra es de US$ 6000 millones. Algo similar ocurre con Rusia, ya que la Argentina sostiene que hay un déficit de US$ 2000 millones, mientras que los rusos afirman que el monto dista bastante del que ellos tienen registrado. Lo mismo sucede con otros países de Europa y de Asia.
Las sospecha recae en una posible manipulación de datos o bien en negociados ilegales en la Aduana. Sea cual fuere el motivo, se planea una comisión especial integrada por funcionarios de distintas áreas para analizar estas cifras.