Cuando la presidenta Cristina Kirchner llegue hoy a Luján para participar del tedéum “oficial” en conmemoración del 25 de Mayo, Sergio Massa comenzará una recorrida por distintos clubes barriales que finalizará por la tarde y lo mantendrá alejado del festejo por “una década ganada”.
De esta manera, el intendente de Tigre, que se convirtió en la principal incógnita electoral y las últimas semanas fue tentado por el kirchnerismo, no participará del lanzamiento virtual de la campaña que planea convocar a más de medio millón de personas en la Plaza de Mayo.
Lejos de la masiva movilización que organiza el Gobierno nacional desde hace semanas, Massa se refugiará en Tigre. Desde temprano, visitará diferentes instituciones como los clubes Juventud, Rincón, Peñarol y una sociedad de fomento en Las Tunas. El intendente repetirá así la misma rutina que realiza desde que comenzó a militar y compartirá locro, empanadas y bailes tradicionales con los vecinos.
Una semana después de compartir dos teleconferencias con la presidenta Cristina Kirchner, Massa dio algunas señales de alejamiento del kirchnerismo. “La foto con la Sociedad Rural es un claro gesto de alternativa al Gobierno”, aseguró uno de los intendentes aliados sobre la visita que Massa realizó a Olavarría para acompañar al jefe comunal local, José Eseverri. Allí se mostró, además, con los intendentes aliados, Luis Acuña (Hurlingham), Humberto Zúccaro (Pilar), Gilberto Alegre (General Villegas) y Carlos Selva (Mercedes).
En ese distrito del interior, además de enviarle un mensaje al campo, Massa se fotografió con el ex ministro de Economía Roberto Lavagna. “Más allá de que Lavagna y Massa puedan finalmente compartir un espacio electoral, el mensaje que dimos ayer es que no esquivamos una foto con nadie, que acá no hay cucos”, sostiene otro alcalde.
Hay encuestadores que mencionan a ambos dirigentes como “nestoristas”, y es allí donde comienzan a aparecer los primeros resultados de los focus group que el grupo consultor yanqui encargó. Según estos estudios, la gente reclama un nuevo padre después de la muerte de Néstor Kirchner.