Morales consiguió un histórico triunfo en Jujuy y terminó con la dinastía peronista

La victoria en la contienda para gobernador de Jujuy del senador radical Gerardo Morales fue la primera certeza en una noche marcada por la expectativa nacional. “Acabo de hablar con Morales y le comuniqué que reconocemos su triunfo”, dijo el gobernador Eduardo Fellner, en una conferencia desde el Salón Blanco de la Casa de Gobierno. “Esto es plena democracia; nos ha tocado perder y le deseamos al nuevo gobernador de la Provincia, que asumirá el 10 de diciembre, la mejor de las suertes”, remarcó resignado.
La prudencia de Fellner contrastó con la euforia que rodeó a Morales. “El pueblo jujeño ha votado para que no haya violencia, para que logremos la unión, el encuentro”, declaró ante los militantes el gobernador electo. Tras una campaña plagada de denuncias, el jujeño celebró que “ganaron los que no quieren la violencia”. Desde temprano el radical se perfilaba como el ganador a partir de los primeros números que se conocieron tras el cierre de las mesas. En el búnker partidario se estimaba que el resultado sería 34% para el gobernador Fellner y un 58 % para la amplia alianza opositora que se encolumó detrás del retador en el Frente Cambia Jujuy (FCJ).
Morales frustraba así la intención del mandatario provincial oficialista de retener el puesto que ostenta desde 1998 de forma continuada -con excepción de un mandato del también peronista Walter Barrionuevo, entre 2007 y 2011. Además, terminaba con una racha de 13 mandatos del Partido Justicialista que, hasta ayer, retuvo el control del ejecutivo provincial de manera ininterrumpida desde la vuelta de la democracia en 1983.

Sin ‘Milagro’. Además de la continuidad en el poder de 32 años, el peronismo local contaba con el apoyo estratégico de la poderosa organización oficialista Tupac Amaru. Tras varias peleas, Milagro Sala había llegado a esta definición alineada con las aspiraciones reeleccionistas de Fellner. Durante la campaña, su organización fue acusada de acciones de violencia política, incluido el asesinato de un militante radical, Ariel Velázquez.
A la espera de resultados en Santa Cruz, ya se hablaba de la tercera gobernación radical que lograba con la política de coaliciones que fijó el congreso partidario de Gualeguaychú en marzo: alianza nacional con Pro y la Coalición Cívica y libertad para que los candidatos provinciales pudieran sumar adhesiones desde otros espacios.
Morales había sido uno de los principales impulsores de una coalición nacional más amplia y fue, sin dudas, el postulante a gobernador radical que en más oportunidades se mostró junto a Sergio Massa en la campaña.
Además de gobernador y los cargos nacionales en juego, diputados y representantes al Parlasur, los jujeños eligieron ayer a 24 diputados provinciales y 21 intendentes. El complejo juego de colectoras pobló de boletas los cuartos oscuros, por lo que se esperaba un difícil y prolongado conteo.