Dina Huapi es una pequeña localidad de Río Negro, ubicada a sólo 15 kilómetros de Bariloche, y cercana al Río Limay, límite con Neuquén. Con sólo 6.500 habitantes, hasta hace poco ni siquiera era un municipio: en 2008 hubo un referendum que lo convirtió en tal, y el 1 de junio de 2009 asumió su primer intendente, el radical Hugo Cobarrubia.
Cobarrubia perdió las últimas elecciones del 24 de julio pasado a manos del candidato del Partido Provincial Rionegrino, Danilo Rojas, actual presidente del Concejo Deliberante. Pero no quiere dejar la recientemente creada municipalidad, ya que desde 1996 ocupaba el anterior cargo de comisionado.
Por eso, el intendente saliente inventó una serie de cargos y creó un concurso para ingreso a planta permanente, pero sin avisarle a nadie. Así, "ganó" el puesto de Director de Servicios de la Municipalidad, y sus funcionarios actuales ocuparon otros cargos.
“Siempre me pagaron como si fuera empleado. Considero que yo estaría dentro de la planta permanente del municipio y así lo interpretan mis abogados”, dijo Cobarrubia al diario La Mañana de Neuquén. El funcionario argumenta que una reciente reforma de la legislatura rionegrina le permite pasar a su nuevo cargo.
“Es una situación única en el país, que un intendente pretenda quedarse en un cargo a pesar de que perdió. Raya lo ridículo. Ellos se tomaron exámenes y eran jurados de los concursos”, denunció por su parte Alejandro Corbatta, presidente electo del concejo deliberante.