La ministra de Salud, Graciela Ocaña, se refirió esta mañana al ex gerenciador del PAMI Rubén Romano, vinculado con el asesinado Sebastián Forza, dueño de un laboratorio de medicamentos, que el martes pasado apareció muerto junto a otras dos personas.
"Había recibido amenazas y se acercaron a contarme que en una reunión con prestadores Daniel Romano había dicho que le salía más barato mandarme a matar antes de que yo siguiera en el PAMI porque estaba perdiendo todos sus negocios históricos", confesó Ocaña a Radio Continental.
Al mismo tiempo, aclaró que al ex gerenciador "lo denunciamos porque a través de una de las droguerías pretendió estafar al PAMI". Consultada sobre los fondos que puso una empresa vinculada a Sebastián Forza en la campaña de Cristina Fernández, la ministra señaló que "cuando uno está dirigiendo una campaña se recibe dinero y la verdad es difícil de chequear de quién es la empresa".