Gustavo Juliá, el empresario detenido junto a su hermano en España con 900 kilos de cocaína, tuvo una activa participación en el PAMI durante la intervención duhaldista, en enero de 2003, mientras se llevó a cabo el período de normalización del organismo.
Así lo reveló la ex ministra de Salud, Graciela Ocaña, que llegó a controlar la entidad durante el gobierno de Néstor Kirchner: "A partir del pedido de intervención se hace una auditoría por parte de la Auditoría General de la Nación (AGN) que establece una cantidad de irregularidades y se decide echar a todo este personal político que había ingresado en la gestión de (Horacio) Pacheco y la anterior”, incluido Juliá, que quedó imputado, fue llamado a indagatoria y consiguió la falta de mérito en una investigación que encabezó la jueza María Servini De Cubría.
Ocaña recordó cuando el PAMI se presentó como querellante en algunas de las causas y destacó que Juliá estuvo involucrado "con la renegociación de un contrato de audífonos con la empresa Amplitone donde se había decidido pagar cuatro millones de pesos en una renegociación contraactual cuando la empresa no había entregado audífonos por bastantes meses".
En diálogo con Mañana Sylvestre, por La Red, amplió el nexo del empresario detenido en Barajas con el líder de los Gastronómicos, Luis Barrionuevo: "La empresa de Juliá estuvo vinculada con un contrato bastante escandaloso", sostuvo la ex funcionario. "Implicaba tener aviones en Aeroparque para supuestos traslados sanitarios que eran usados por los funcionarios del PAMI o por funcionarios políticos para viajar", indicó.