Luego de una gira por África del Norte en 2008 con la comitiva oficial y su hija Florencia, Cristina Fernández de Kirchner había realizado un importante anuncio: traería a la Argentina los tesoros de la tumba de Tutankamón en una muestra que había sido programada para toda América Latina.
La jefa de Estado fue quien se encargó de revelar que había solicitado a las autoridades egipcias "la posibilidad de llevar a la muestra de Tutankamón a la América latina y que fuera la Argentina la que tuviera el altísimo honor de ser el primer país, donde se expusiera ese verdadero tesoro de la historia de la humanidad".
"Será para esta humilde argentina, les puedo asegurar, algo impensado, pero dicen que los sueños se realizan y cuando uno le pone voluntad, pone trabajo, esfuerzo, compromiso, convicciones y confianza, atributos que creo tienen ustedes los egipcios y nosotros los argentinos", señaló.
Sin embargo, ahora la promesa de CFK no podrá cumplirse. Hoy, el ministro egipcio de Antigüedades, Mamduh al Damati anunció que la tumba del faraón Tutankamón quedará cerrada a las visitas turísticas a partir del 1° de octubre próximo por trabajos de restauración.
Según informó la agencia EFE, el director del Departamento de Egiptología, Mahmud Afifi, explicó que las obras de restauración y mantenimiento incluirán un cambio del suelo, por lo que la momia de Tutankamón será trasladada a una de las cámaras laterales de la tumba.
Es así, como ante este anuncio, el deseo de la mandataria queda opacado y su promesa pasa a registrarse en la lista de pendientes de la década K.