A través de un comunicado de prensa de la gobernación de Santa Cruz, el actual mandatario y candidato a seguir en su puesto, Daniel Peralta, se desligó de la responsabilidad de la orden de represión en Caleta Olivia y culpó a un fiscal de Chubut.
En el Boletín 865 el Poder Ejecutivo provincial sostuvo que ante el corte de ruta de los trabajadores de EMPASA "el Fiscal perteneciente a la Justicia Federal con asiento en Comodoro Rivadavia, provincia de Chubut (que tiene competencia territorial), ordenó el procedimiento de desalojo, produciéndose incidentes entre efectivos de Gendarmería Nacional y un grupo de manifestantes".
"Como consecuencia de ello, -continúa el escrito- lamentablemente resultó con lesiones la periodista caletense Adela Gómez, quien fue atendida en el Hospital Distrital local y en función de la información suministrada por el Ministerio de Asuntos Sociales, en las próximas horas sería dada de alta".
Por su parte, el comandante de Gendarmería, Roberto Caserotto, dijo que la fuerza de seguridad reprimió a trabajadores en Caleta Olivia por temor a agresiones con manifestantes kirchneristas y confirmó que serán relevados el jefe del operativo y el autor del disparo contra una periodista.
Caserotto manifestó que "se dio una circunstancia muy particular porque había cinco camiones y cuatro o cinco colectivos con manifestantes y se temió una agresividad entre ellos". "Si hubo o no agresiones se declarará en la Justicia", acotó.
Según las primeras inflormaciones, la orden de desalojo de la ruta fue decidida por la jueza federal de Comodoro Rivadavia Eva Parcio, según les comunicó el jefe del operativo, Raúl Mesa, a los trabajadores. Sin embargo, fuentes vinculadas a la investigación de los hechos en la ruta nacional 3 habrían asegurado que "no fue ella quien dio la orden de reprimir y desalojar".
Peralta también reconoce en el comunicado que fue él quien le pidió al ministro Aníbal Fernández la intervención "inmediata" del Ministerio del Interior para "que evalúe las responsabilidades que correspondieren a los efectivos que actuaron en el procedimiento".
Con respecto al conflicto laboral que enfrenta a los empleados de EMPASA, la gobernación de la provincia de Santa Cruz, aseguró que "desde hace 11 días se mantienen continuas reuniones entre los responsables de la firma y los trabajadores que se encuentran con medidas de fuerza", pero que "hasta el momento no se pudo arribar a un acuerdo".
Para finalizar el delfín de Néstor Kirchner se confiesa "angustiado por este nuevo hecho de violencia" y lanzó un "llamado a la paz social" para "preservar la construcción de una sociedad donde todas las voces puedan ser escuchadas".
Fuente: DyN y Agencia Opi Santa Cruz
