"Está mal asesorada, Presidenta. Usted está permitiendo que los prefectos y los gendarmes se mueran de hambre", lanzó el apartado gendarme Raúl Maza, en el centro de la Plaza de Mayo, rodeado por varias decenas de compañeros que reclaman mejores salariales a raíz de un polémico decreto que firmó la misma mandataria.
Unos 400 manifestantes se reunieron en el edificio Guardacostas de Prefectura en Puerto Madero y desde allí marcharon a Plaza de Mayo por la Avenida Madero. El grupo fue "custodiado" por agentes de la Policía Federal que les iban indicando el camino "pacífico". Poco antes de llegar, el comisario a cargo del operativo, Mario Martínez, se acercó al agente Maza, el líder de la protesta apartado por sus superiores, y le garantizó que "que no iba a ver inconvenientes".
El "vocero" Maza se paró ante la prensa y aseguró que a la Presidenta "no la desconocen como Jefa de Estado" para disipar cualquier acusación de "golpistas" e insistió: "Necesitamos que nos escuche; este problema es urgente y el petitorio es justo".
El enfermero de Gendarmería también recordó que el secretario de Seguridad, Sergio Berni, "no nos llamó nunca para ver cómo estaban nuestras familias" durante las primera protestas. Como en ocurrió en lo cacerolazos de septiembre, los efectivos de seguridad marcharon al grito de "no tenemos miedo" y, en relación a su reclamo: "Con el salario no se jode".
Menos claro que antes. Por otro lado, un suboficial que pidió no identificarse consideró a Perfil.com que el ministro de Economía, Hernán Lorenzino, y el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, no aclararon "las cuestiones de fondo" durante la conferencia de prensa que brindaron en el Palacio de Hacienda.
"Nunca dijeron cuánto vamos a cobrar, nunca aclararon cómo va estar conformado el haber del gendarme. No lo hacen porque no les conviene", estimó al suboficial.
Respuesta oficial. El cabo 1º de Gendarmería, el suboficial Fernando Brítez, relató a Perfil.com cómo fue maltratado por la subsecretaría de Derechos Humanos de la Nación cuando esta tarde se comunicaron para tender otro puente de negociación.
"Llamamos para pedir ayuda por deficiencias en las instalaciones de Capitanía y me pasaron con Florencia Stroch. Ella, en lugar de darme una respuesta, me respondió. 'Tu reclamo es ilegítimo. Ustedes no tienen el derecho a hacer esto'", increpó la funcionaria, según relató el gendarme.