Su paso por Tandil le dejó una nueva recomendación médica. El intendente Miguel Lunghi y médico personal le dijo que comience a tomar Berocca, un complejo de vitaminas. “Es por el desgaste físico y psíquico que tengo”, se ríe Daniel Scioli. Sucede que el gobernador estuvo esta semana una vez más en el centro de las críticas de Cristina Kirchner. Nunca lo nombró, pero la Presidenta se quejó el jueves de quienes quieren “quedar bien con todos y tener un millón de amigos”.
La jefa de Estado no le perdona al gobernador su “tibieza” frente a la batalla contra el Grupo Clarín y la forma en que se mantiene al margen de las disputas y denuncias que enfrenta el Gobierno. Por ello, Cristina despotricó contra “los dirigentes a los que los grandes medios corporativos nunca tocan”. La mayoría interpretó que aludía a Scioli, quien ayer prometió mantenerse dentro del oficialismo pero salió a responder.
—¿Está protegido por los medios?
—¿Vos me protegés?
—No. ¿Clarín lo protege?
—Pero por favor, cuántas veces hubo críticas de todo tipo. Tomá el diario para ver el tema de la inundación, el tema del campo, las candidaturas testimoniales.
—¿Cree que la Presidenta le hablaba a usted el jueves cuando lanzó las críticas?
—Alguna vez me escuchaste decir que no me hago cargo del tema de la seguridad, por ejemplo, si desde el punto de vista constitucional los gobernadores somos los responsables. Yo no puedo sentirque hubo una referencia en cuanto a poner la cara, porque si hay algo que siempre hice en toda mi carrera política es asumir responsabilidades. Estuve en los momentos más duros del proyecto cuando hubo conflictos muy importantes, y ahí siempre prevaleció mi consecuencia y no mi obsecuencia. Yo no cambié, yo soy el mismo.
—Si usted cree que pone la cara, ¿qué siente entonces cuando lo critican por no mostrar fidelidad?
—No soy quejoso. Una persona que perdió el brazo y siguió con esa situación... No soy quejoso.
—¿Entonces no le importan las críticas?
—¿A qué persona no le importan? Sería masoquista si dijera que me gustan las críticas, pero cuando estoy en este trabajo no pierdo de vista que tengo que buscar soluciones y no reaccionar ni conbronca ni quejándome. A mí me pueden criticar cualquier cosa, pero si hay algo que hago siempre es estar donde están los problemas.
—Hace dos años me dijo que al principio Cristina Fernández lo defendía ante Néstor Kirchner. ¿Cambió algo en la relación?
—Las relaciones tienen sus distintas alternativas, como todo vínculo personal. Y yo la entiendo a ella; hoy se está viviendo un momento de tensión, de preocupación, que yo también tengo. Estoy preocupado; no sería humano si te dijera que estoy feliz, contento... nunca negué la realidad. Siempre la asumo y busco salir adelante.
—Para el kirchnerismo, usted no pone la cara en las batallas que consideran cruciales, como las peleas contra el Grupo Clarín o la reforma judicial.
—¿Quién es mi vicegobernador?
—Gabriel Mariotto.
—¿Y qué hizo Mariotto? (N de R: fue el impulsor del proyecto de la Ley de Medios).
—Pero a usted le impusieron a Mariotto, no lo eligió...
—Yo consensúo las cosas. No impongo ni permito que me impongan cosas, las hago en función de lo que es un trabajo integral de un proyecto político.
—El kirchnerismo le reprocha que nunca se refirió a la batalla contra el Grupo Clarín.
—Yo las batallas las acompaño a mi manera. Decime en qué tema, uno sólo nombrame, no me viste estar al lado del ex presidente o de la Presidenta.
—En la pelea contra Clarín.
—Cuando se presentó la Ley de Medios estaba en el Teatro Argentino. Hay maneras y maneras de acompañar. Yo acompaño a mi manera. Es una forma de ser que tengo. Doy las batallas a mi manera, buscando sumar y no dejarme llevar por la intolerancia de un lado o del otro.
—¿Va a romper con el Gobierno nacional?
—Romper... ¿Sabés lo que rompo todos los días? Cocinas de paco, desarmaderos, mafias de la droga, esas cosas rompo todos los días. Cómo voy a querer destruir lo que ayudé a construir a lo largo de estos años. Yo ahora tengo una de las más altas responsabilidades institucionales después de la Presidenta.
—¿Se siente acompañado por el kirchnerismo?
—Yo entiendo a la Presidenta y muchas de las cosas que ha dicho. Porque me pasa lo mismo; yo también a veces quisiera que me acompañen más.
—¿Desde el Gobierno nacional?
—En general. Pero uno cuando está al frente de esto tiene que hacerse cargo y luchar. Esas cosas las entiendo y estoy para colaborar, no para confrontar. Esta es mi personalidad.
—¿Cristina le pidió ser candidato en esta elección?
—No.
—¿Y si se lo pide?
—Mirá si con la huelga docente voy a estar preocupado por el tema electoral. Sí voy a buscar defender mi gestión.
—¿Va a participar de la campaña?
—¿Cómo un gobernador no va a estar activo en la campaña?
—¿Aceptaría una candidatura?
—La de 2009 (N de R: se refiere a las candidaturas testimoniales) fue una situación absolutamente extraordinaria. No hagamos especulaciones. Yo quiero hablar de los temas que le interesan a la gente, que son que haya clases y resolver los problemas de la inseguridad.
—¿Cree que Sergio Massa es un buen candidato para competir este año?
—Está pensando una decisión. Entiendo que se tome el tiempo para pensar, porque son decisiones muy importantes. Lo que yo espero, y lo que esperamos todos los que integramos el Frente para la Victoria y participamos a lo largo de estos años, es que el ordenamiento de las candidaturas se pueda dar dentro del Frente para la Victoria. La de Massa, así como la de Felipe Solá, y otras.
—¿Le gusta el sketch que hacen de usted en el programa de Jorge Lanata?
—Yo soy mucho más activo, yo soy de acción. ¿Vos te creés que una persona que llegó adonde llegó puede estar así? Preguntale a Karina por mi temperamento. Soy una persona decidida, de acción.