Los gobernadores de Buenos Aires y Córdoba y un ex jefe de Gabinete de la gestión K coincidieron en repudiar el bloqueo a la planta de Clarín el último domingo. Daniel Scioli consideró que se trata de un método que "no contribuye a nada" y se desmarcó de la mayoría del Gobierno nacional que atribuyó el bloqueo a un conflicto sindical.
"Rechazo estos métodos que no contribuyen en nada, sea el bloqueo a quien sea, Clarín o si mañana bloquean Tiempo Argentino u otro medio oficialista. La democracia se nutre de la diversidad y de la pluralidad, más allá del justo o no reclamo salarial", manifestó el ex motonauta.
"La libertad de expresión y la libertad de prensa son pilares de nuestra democracia, y tenemos que protegerlos y cuidarlos. Hay que generar la conciencia y el rechazo de lo que estos piquetes pueden generar", agregó.
Según el bonaerense, “intentar bloquear la distribución de medios de comunicación es un procedimiento autoritario que merece el repudio de quienes trabajamos por un país plural y creemos en la diversidad, la tolerancia y el respeto como valores esenciales de nuestra forma de vida”.
En el caso del cordobés, Juan Schiaretti, que lleva una relación de altibajos con el Gobierno nacional, consideró “una barbaridad y estoy absolutamente en contra de una acción que coarte la libertad de prensa, que es uno de los pilares del funcionamiento de la democracia”, expresó.
El intendente de Tigre y ex jefe de Gabinete, Sergio Massa, escribió una carta a la redacción del diario donde expresó su "más enérgico rechazo al triste episodio que generara el bloqueo de la circulación del Diario" al tiempo que indicó que "hechos como éste significan un retroceso de la democracia argentina, y de los hábitos de tolerancia de una sociedad democrática".
Massa señaló que “garantizar la libre circulación de diarios debe ser un principio básico de una sociedad con comportamientos democráticos, porque significa ni más ni menos que garantizar la circulación de ideas diversas, sean estas parecidas o distintas a las que uno elige”.
El último domingo, por quinta vez desde el mes de noviembre un grupo de 50 manifestantes - apoyados por el gremio de Camioneros - bloqueó durante 12 horas la planta que el diario Clarín tiene en el barrio porteño de Barracas y que demoró la edición del matutino, hecho que cosechó el repudio de políticos, empresarios, medios y figuras de la cultura y el espectáculo pero fue minimizado por funcionarios del Gabinete nacional. Desde la oposición se propuso, en este marco, el juicio político a la ministra de Seguridad Nilda Garré por incumplir el fallo judicial que exigía desbloquear cualquier manifestación que impidiera la salida del periódico.