La Casa de Gobierno fue este miércoles centro de insistentes versiones sobre varias renuncias en el equipo de la presidenta Cristina Fernández, aunque el único cambio confirmado fue la designación de Juan Pablo Schiavi como nuevo secretario de Transporte, en reemplazo del multiprocesado Ricardo Jaime. Según se indicó, este dejaba su cargo "por razones personales".
En tanto, el titular de Comercio Interior, Guillermo Moreno, también mencionado como otro de los renunciantes, fue confirmado por ahora en el cargo, según afirmó una alta fuente del Gobierno nacional.
De esta manera, Jaime se transformó en el segundo funcionario en abandonar el Gobierno K luego de la renuncia, el mismo lunes posterior a las elecciones, de Graciela Ocaña como ministra de Salud.
Tanto Moreno como el ministro de Economía, Carlos Fernández, a quien los trascendidos habían incluido entre los que podían abandonar el gobierno, estuvieron presentes en el acto de juramento del flamante titular de Salud, Juan Luis Manzur, pero fue notoria la ausencia de Jaime.
Jaime, uno de los funcionarios más cuestionados por sus oscuros manejos en el área de Transportes no asistió a la ceremonia de asunción de Manzur, lo que en ese momento confirmó el cambio de mano en el área. Ante la falta de una palabra oficial y los insistentes rumores, apenas finalizó el acto de jura del Manzur, los periodistas consultaron al secretario General de la Presidencia, Oscar Parrilli, sobre la veracidad de las versiones, pero el funcionario negó novedades al respecto. Sin embargo, para esos momentos, Jaime ya estaba fuera del gobierno.
Por la mañana, la presidenta Cristina Fernández, había suspendido el viaje que tenía previsto iniciar esta noche para integrar la comitiva que acompañará al destituido presidente de Honduras, Manuel Zalaya, de regreso a su país. La fuente oficial consultada explicó que esa comitiva internacional podría partir recién el sábado próximo, por lo cual la presidenta viajaría el viernes a Washington y de allí se trasladaría hacia la capital de Honduras.
Entre las actividades de la jornada, Cristina Fernández analizó con el jefe del bloque de diputados kirchneristas, Agustín Rossi, y el ministro del Interior, Florencio Randazzo, el nuevo escenario que se presentará para el oficialismo en el Congreso tras la derrota en las elecciones legislativas.
El encuentro se desarrolló en Olivos donde también se debatió la agenda legislativa que se presenta en el segundo semestre del año hasta que se produzca, en diciembre, la renovación de ambas Cámaras. Las leyes que están en carpeta para su tratamiento son la prórroga de los denominados "Superpoderes", el Presupuesto 2010, la prórroga de la Emergencia Económica y del Impuesto al Cheque. En todos esos temos el Gobierno podría apelar a la composición actual de Diputados y Senadores, claro que exponiéndose a pagar un alto costo político. Esperar a diciembre puede convertir a esas iniciativas en pasibles de ser rechazadas.
En el horizonte también está la nueva Ley de Radiodifusión, impulsada por el Poder Ejecutivo Nacional, y la Reforma de la Ley de Quiebras.
En tanto, en la primer autocrítica oficial sobre el resultado del comicio, Aníbal Fernández, reconoció que la lista encabezada por Francisco de Narváez "ganó en buena ley" en la provincia de Buenos Aires, y evaluó que en la discusión de algunos temas de campaña, como la distribución del ingreso, desde el oficialismo "no hemos sido lo suficientemente claros y contundentes". Fernández consideró que, no obstante la derrota, "hay que seguir aprovechando las cosas buenas que hicimos y que fueron reconocidas por la mayoría de los que votaron, porque tenemos cerca de seis millones de votos".
El actual administrador de Infraestructura Ferroviarias, Juan Pablo Schiavi, reemplazará al renunciante Ricardo Jaime al frente de la secretaria de Transporte. Así lo confirmaron altas fuentes del gobierno luego que la Presidenta la aceptara la renuncia al polémico funcionario, quien hoy había dicho que dejaba su cargo "por razones personales".