POLITICA

Stiuso suma una nueva causa, esta vez por lavado de dinero

La exesposa de un exagente vinculado al espía registra “movimientos injustificados por más de cinco millones de pesos”. Toda su familia dejó el país.

Stiuso, desde el país o desde el exterior, el real dueño del poder de los servicios.
| Cedoc

Antonio “Jaime” Stiuso, el exagente de la exSIDE que trabajaba junto al fallecido fiscal Alberto Nisman, otra vez está en la mira de una nueva causa judicial, esta vez por presunto lavado de dinero. Un informe de la Secretaría de Inteligencia (SI) habla de la relación "cercana" entre el espía y el exagente José Daniel Salinardi, cuya exesposa, Mónica Rodríguez y, la firma Mans Constructora SRL tienen "movimientos injustificados por más de cinco millones de pesos”.

El juez Daniel Rafecas investiga la relación de Stiuso con Salinardi a partir de un reporte de operaciones sospechosas del banco Santander Río, canalizado a través de la Procuraduría Antilavado que dirige el fiscal Carlos Gonella. 

En esas actuaciones "se constataron acreditaciones por 5.806.677 pesos realizadas mediante cheques y depósitos en efectivo que no pudieron ser justificados" por lo que el magistrado solicitó a la central de inteligencia los legajos personales de Salinardi y su vinculación con la empresa constructora, según consigna el diario Tiempo Argentino.

La publicación sostiene que "en las últimas semanas todos los familiares directos de Stiuso abandonaron el país, por lo que los investigadores creen que no regresará, a pesar de que pueda mediar un llamado a indagatoria por parte de la justicia en alguno de los expedientes en los que está acusado, entre otros delitos, de contrabando e incumplimiento de los deberes de funcionario por ocultar información de la causa AMIA”.

En la causa figura un complejo entramado "de una enorme cantidad de empresas las que están bajo la lupa por lo que el análisis de su giro financiero para saber si canalizaron fondos reservados provenientes de la central de espionaje podría demorar varios meses".

Jaime Stiuso abandonó el país el 20 de febrero de 2015, luego de declarar como testigo en la causa por la muerte del fiscal Alberto Nisman, junto a su esposa, María Cecilia Rossero, y la pequeña hija de ambos, de seis años, presuntamente con destino a la ciudad de Miami en los Estados Unidos, mientras que días después lo hicieron sus dos hijas, Silvia Natalia y Mónica Cecilia.