El legislador tucumano Pedro Balceda, integrante del partido oficialista reconoció que muchos punteros regalan "paco" para movilizar gente a los actos políticos.
Las declaraciones de Balceda generaron malestar en sus pares, sin embargo el propio gobernador José Alperovich aumentó aún más la controversia cuando dijo que "los jóvenes que consumen paco son irrecuperables" y afirmó tener
conocimiento que en el centro de la ciudad "los jóvenes ricos después de un asado se fuman un porro o consumen cocaína".
La polémica por la venta de drogas estalló en Tucumán en los primeros minutos del pasado 25 de Diciembre, cuando un "dealers" (vendedor de droga), le dio muerte de un disparo a un joven que fue a su casa a comprar "paco",
en el barrio Costanera, ubicado en las periferias de la capital tucumana.
De acuerdo a los datos que manejan distintas organizaciones, en esta zona de asentamientos precarios, al margen del rió Salí, el 80 % de los jóvenes del lugar es adicto. Los padres de los jóvenes denunciaron que la policía sabe donde venden la droga pero no hace nada. Las madres de los adictos por su propia cuenta sacaron fotos y señalaron las casas donde se venden estupefacientes a las autoridades policiales, que permanecen con una llamativa inacción. Días después estas mismas madres fueron amenazadas y viven atemorizadas en el barrio.
En declaraciones a la prensa, el legislador Pedro Balceda, del oficialista Frente para la Victoria dijo que la situación es conocida por sus compañeros de bancada y recordó que presentó un proyecto que duerme en los cajones del ejecutivo. Además admitió que la situación es utilizada por punteros que les regalan drogas a los jóvenes de estos barrios marginales para que asistan a los actos proselitistas.
Días después, el denunciante renunció al bloque, debido a la presión ejercida por sus pares de bancada que analizaban expulsarlo. Balceda fue citado por la Justicia Federal para declarar la próxima semana.
El pasado lunes, recibió en su despacho de la legislatura de la provincia, un sobre que contenía cocaína, en un claro mensaje intimidatorio. Mientras tanto las autoridades policiales y sanitarias de la provincia, continúan minimizando la situación.
(*) Especial para Perfil.com
