Cristina cumple hoy su primer mes de gestión sin Néstor Kirchner, el hombre que concentraba decisiones claves sobre la economía y la política del Gobierno. El hombre en el que ella se recostaba y que le servía para desentenderse de asuntos como el armado territorial en la provincia de Buenos Aires.
Desde la desaparición de su compañero de la vida, la jefa de Estado ofreció varios discursos, se quebró en muchos de ellos al recordarlo, enfrentó una dura negociación por el Presupuesto, combatió internas en su Gabinete, anunció un acuerdo con el Club de París y un plus de 500 pesos para los jubilados. En ese lapso utilizó tres veces la cadena nacional.
La primera fue el lunes 1º de noviembre, después de los funerales del ex presidente. Se dirigió al país tras un silencio de cinco días para comunicar que no atravesaba su momento más difícil, sino el más doloroso. La cadena fue grabada a las 17.40 y transmitida tres horas después. Antes, ella había recibido las cartas credenciales de siete embajadores. Siempre vistiendo de negro, CFK participó esa semana de una seguidilla de actos en los que anticipó que había que "profundizar el modelo", y en los que destacó el crecimiento económico de la Argentina.