Así criticó el acuerdo que el presidente de Colombia, Álvaro Uribe, firmó con Estados Unidos, para permitir la presencia de militares estadounidenses en al menos siete bases de las fuerzas armadas colombianas. "No puede haber una soberanía que imponga condiciones a la demás, que tenga supremacía", sostuvo Cristina.
Además, la Presidente argumentó que Argentina y Estados Unidos son "los únicos dos países que hemos sufrido atentados terroristas (extracontinentales), en Torres Gemelas (2001) y las voladuras de la embajada de Israel (1992) y de la AMIA (1994)". Por último, repudió la ocupación de Gran Bretaña en las Islas Malvinas, el eterno reclamo de la diplomacia local.
"El acceso de los Estados Unidos para ayudar a Colombia en la lucha contra el narcoterrorismo es un acceso sin renuncia de Colombia a la soberanía sobre un milímetro de territorio", se defendió, y agregó que dicho acuerdo "se rige por el principio de la igualdad soberana. No hay renuncia colombiana a soberanía, ni abdicación. Se rige por el principio de la integridad territorial de los estados", dijo Uribe en su intervención.
El Presidente de Colombia se opuso al criterio que defienden varios países del continente, de despenalizar a los consumidores de drogas para concentrar sus fuerzas en los narcotraficantes. "Eso se utiliza como factor de inducción de la niñez a la criminalidad. La discusión debe ser contraria, sobre la necesidad de ilegalizar el consumo". También propuso como eje de discusión, "el principio de la corresponsabilidad de todos" los países en la producción, el tráfico y el consumo de estupefacientes.
Los línea común de los participantes, hasta el momento, coinciden en el rechazo a las bases estadounidenses en los países de la región. Correa, Morales, Cristina Kirchner y Hugo Chávez coincidieron. Evo pidió una declaración expresa de rechazo a las bases en el documento final del encuentro.
La nota distintiva la dio Alan García. El presidente peruano cuestionó la eficacia de Unasur porque dice que desde el momento de su creación se registran mayores conflictos que antes. También replicó a Chávez por ser proveedor de petróleo a Estados Unidos mientras que critica a esa nación. Además, fustigó la compra millonaria de armamento por parte de las naciones de la región.
García pidió que las resoluciones de las Cumbres sean vinculantes. El gesto de rechazo de Correa, Chávez y Cristina Kirchner fueron manifiestos. Al terminar su intervención, Correa le contestó que no estaba de acuerdo en el aumento de conflictos pero sí en la necesidad de convertir estas reuniones en vinculantes.
Le pidió a Uribe, que "ponga las cartas sobre la mesa" y detalle, en el curso de la cumbre del Unasur, en qué consiste la colaboración militar que aceptó recibir de parte de los Estados Unidos para la lucha contra el narcotráfico y el terrorismo.
García propuso además que una "comisión de verificación" de la Unasur viaje a Colombia para inspeccionar las bases donde estarán las tropas estadounidenses. El primer mandatario peruano advirtió que su postura respecto de la polémica depende porque, si Colombia recibiera "radares esféricos y bombarderos invisibles", rechazaría de plano esa posibilidad, pero si en cambio obtuviera "equipos para ayuda civil y pacífica", lo aprobaría. Agregó que curiosamente "ahora hay más conflictos entre nosotros que cuando no existía el Unasur", al tiempo que exhortó a los miembros a "ceder algo" y "negociar" en aras de lograr una coincidencia total en la Unasur para además mostrar fortaleza como "bloque" frente al resto del mundo.
Sobre el acuerdo militar entre Colombia y Estados Unidos, García expresó: "No haría mal al continente que una comisión de verificación nuestra tuviera lugar in situ para mirar, yo lo permitiría en mi país". García remarcó que su propuesta de integrar esta comisión verificadora "fortalecería enormemente a la Unasur" y consideró que el análisis que se esta dando por el tema de las bases militares tiene el aspecto "positivo para el reelanzamiento más sólido" del bloque regional.