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VENECIA DESAFíA AL CORONAVIRUS

Cate Blanchett se cargó la alfombra roja del primer festival en pandemia

La actriz australiana dijo que tuvo miedo de viajar a Italia por el rebrote de casos de Covid-19 pero ya en Venecia celebra “el milagro”.

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Protección. Con barbijos, el elenco de Lacci, película italiana fuera de competencia que abrió el Festival de Venecia, algo que hace muchos años no sucedía. | ap

Las máscaras que son un símbolo de esa ciudad de ensueño tanto como sus canales, góndolas y vaporettos, se ven reemplazadas por el tapabocas. Pero la escenografía de Venecia supera a ese accesorio obligatorio en tiempos de rebrote de casos por coronavirus. La Biennale extendió su alfombra roja para la 77a edición de su festival de cine, el primero de relevancia internacional desde que el Covid-19 paralizó a la industria cinematográfica en marzo. En el lanzamiento Cate Blanchett, anfitriona como presidenta del jurado,  no escapó a la coyuntura y se manifestó desconcertada de que otros países no hubieran aprendido del dolor de Italia para prepararse mejor contra el coronavirus cuando se propagó la pandemia. Llegó al Lido con barbijo quirúrgico –es decir, no buscó uno que combine con su vestuario–, se saltó la sesión de fotos al bajar del vaporetto, evidencia de las normas de prevención sanitaria y distanciamiento social que le dan sobriedad al evento que, en general, ya desde esa bajada aporta una escena clásica del festival. De hecho, otra de las medidas sanitarias es que el público no tiene acceso a la alfombra roja para ver a los famosos.  

Blanchett comentó también que tuvo miedo de viajar a Italia, el primer país europeo donde el coronavirus hizo estragos. Pero dijo: “Debemos ser valientes. (…) Cada vez que uno comienza un proyecto, sea en pandemia o no, siempre se siente como el primer día de clases”. Como embajadora de buena voluntad de Naciones Unidas criticó la decisión de Estados Unidos de retirarse de la Organización Mundial de la Salud, y señaló que no entendía por qué no se le permitió a las Naciones Unidas tener un papel de mayor liderazgo en la crisis sanitaria. “Pienso que somos una especie muy rara que no aprende de ejemplos dolorosos, como la terrible situación que atravesó Italia. A veces nos comportamos de maneras bastante obtusas, fragmentadas y destructivas, y finalmente poco útil”, dijo en la conferencia de prensa. 

En lo que respecta al festival propiamente dicho, Cate Blanchett destacó que estaba honrada de ser parte de un festival que está ayudando a la industria a resurgir de una crisis económica artísticamente devastadora. “De hecho, este festival parece milagroso”, dijo.

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Apuesta al cine. Con la realización del festival, Venecia reclama su posición como destino cultural de primera categoría, más allá de ser ya el más antiguo del mundo. Sobre todo teniendo en cuenta que es el primero de carácter presencial de 2020 después que Cannes canceló su tradicional festival, y otros optaron por ofrecer versiones online. Venecia y toda la región del Véneto aplicaron cuarentena estricta apenas apareció el virus en la ciudad en febrero último. A diferencia de la vecina Lombardía, epicentro europeo de la pandemia, el Véneto pudo contener el brote inicial del virus con confinamientos locales y amplios testeos. Igualmente, Venecia, por ejemplo, iba a ser centro de tres semanas de rodaje una la superproducción de Tom Cruise, Misión Imposible 7, pero quedó suspendida sin fecha nueva. 

El titular de la Biennale, Robert Cicutto, dijo que la decisión de realizar el festival era una señal importante del renacimiento de Venecia y la industria cinematográfica, y que la experiencia en el Lido “será un experimento sobre el terreno de cómo manejar un evento importante” en pandemia. Los invitados al festival no están exentos de las restricciones y al llegar se les realiza un testeo. En todas las proyecciones hay asientos reservados y bien separados, y el uso del barbijo es obligatorio en todas partes.

Las restricciones de viajes de Estados Unidos a Europa significan que las películas de Hollywood, que suelen usar a Venecia como trampolín para otros festivales y los Oscar, estarán ausentes este año. Eso sucedió con dos recientes películas: Lady Gaga y Bradley Cooper estrenaron en Venecia Nace una estrella o Joaquin Phoenix ganó el León de Oro en 2019 con Joker antes de recorrer un exitoso camino hasta el Oscar. En esta edición, si bien no es un largometraje, Pedro Almodóvar le dio a Venecia el estreno de La voz humana, que filmó en las semanas posteriores al fin de la cuarentena en España. Este no solo es un mediometraje, sino que es lo primero que filma en inglés y con una actriz no española: Tilda Swinton, quien recibió el León de Oro a la Trayectoria en la presente edición. Y a pesar de que la competencia será reducida en relación con previas ediciones, Italia inauguró el festival por primera vez en años con Lacci de Daniele Luchetti, un drama familiar presentado fuera de competencia.