La fiesta del deporte finalmente empezó. Y con ella, la atención puesta de todo el mundo. Los Juegos Olímpicos no son solo un encuentro de los atletas, sino también de referentes políticos y distintas personalidades. Ayer la voz de Gilberto Gil, dio comienzo a la fiesta inaugural de los Juegos Olímpicos 2016 En el estadio Maracana el presidente argentino, Mauricio Macri, disfrutó junto a otros 36 dirigentes, entre los que se destacaron el presidente de Francia, Francois Hollande; el canciller John Kerry; el primer ministro de Italia, Matteo Renzi y el Rey de los Paises Bajos, Guillermo, quien asistió sin Máxima Zorreguieta.
Macri estuvo en compañía de su mujer, Juliana Awada con quien llegó a esta ciudad el jueves por la tarde y fueron recibidos por el embajador de argentina en Brasil, Carlos Margariños. Por la noche, Macri y Awada fueron agasajados en una cena que organizó el Comité Olímpico Internacional. Allí estuvo Gerardo Werthein, presidente del Comité Argentino. La primera dama lució un vestido corto color negro, con pedrería y en damero, de la firma italiana Marco De Vincenzo. Se tratño de un modelo que ya había elegido el año pasado para su visita a ShowMatch. En este caso, agregó unas sandalias negras de tiras y un clutch con piedras y brillos.
Macri tuvo la oportunidad de conversar ayer al mediodía con Juan Martín del Potro en medio de una nota que Gonzalo Bonadeo le estaba haciendo a Macri. “¿Cómo estás para el partido con Djokovic?”, fue la primera pregunta que le hizo al tenista, quien reconoció estar en un cuadro muy difícil porque tiene que enfrentar al número uno del mundo, como así también le aseguró que le hubiese gustado jugar en una superficie de césped. El tandilense lo desafió con rapidez a un duelo en Argentina: “En Buenos Aires jugamos al tenis o al paddel. En la Bombonera también puede ser”. Antes, el Presidente había sostenido que Brasil está poniendo todo en un momento crítico de ellos. “Han puesto un gran esfuerzo por encima de la crisis y es seguro que los Juegos van a ser un éxito”, señaló.
Según trascendió, hoy sábado, antes de regresar a Buenos Aires, Macri y su mujer visitarían personalmente la villa olímpica para conversar con los atletas argentinos y desearles suerte en las respectvias competencias.