El precio internacional de la soja se disparó alcanzando el valor máximo desde julio de 2016, y este fenómeno ilusiona al gobierno. En ese contexto, RePerfilAr dialogó con el periodista agropecuario, Facundo Mesquida, quien explicó que "el factor determinante que está impulsando el precio de la soja es la demanda china".
Además, los fundamentos de la suba radicaron en el recorte de stocks y de producción en Estados Unidos publicados por el USDA. "La relación stock, consumo es la más baja de los últimos siete años", puntualizó el especialista y agregó que los principales productores después de Estados Unidos se encuentran con complicaciones climáticas para la siembra en Argentina y Brasil.
El clima condiciona la campaña sojera
En ese sentido explicó que "si Estados Unidos no vende" soja, y a eso se le suma "una cuestión climática de sequía extrema, que se proyecta en un 90% de probabilidad" estos factores harían que haya menos grano, de tal manera "podría llegar a determinar que el precio se eleve, por una cuestión de oferta y demanda del mercado", y esto beneficiaría a la Argentina.
Aunque aseguró que "las variables están dadas" para que el precio de la soja siga aumentando, Mesquida puntualizó que "hay que detenerse en ver si el productor vendería o no". "¿Qué hace el productor con los pesos? Más allá que su grano cotiza en dólares, el recibe pesos. Entonces los productores que pueden van a guardar el grano hasta que el precio mejore, o se vean forzados a venderlo. En las condiciones macroeconómicas de la Argentina, no le es un gran negocio al productor ahorrar en pesos, con lo cual ahorra en granos", cerró.
