Una mesa de jugadores de póker puede ser rápidamente asociada a un casino o un campeonato donde la plata es lo único que importa, y donde el que más tiene dispone de más chances de apostar y ganar. Pero algunos aficionados a esta "disciplina", como prefieren llamarla, hablan del póker como un deporte mental, en donde las estrategias y las habilidades mentales del jugador están más en juego que el dinero.
De hecho, el póker ya fue reconocido mundialmente como un deporte mental por la International Mind Sports Association - IMSA, y hasta podría incorporarse en los Juegos Mundiales de Deportes de Mente, un evento que se disputará en paralelo a los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Y este fin de semana, sin ir más lejos, se realizará en esa misma ciudad de Reino Unido el primer campeonato mundial individual de póker, organizado por la Federación Internacional de Póker, en el que la Argentina estará representada por un diseñador gráfico de 42 años.
Se trata de Fabián De Souza, que descubrió el póker hace sólo tres años, mientras jugaba con su esposa y otra pareja de amigos un sábado a la noche, en una casa, a modo de entretenimiento. En vez de fichas o plata, usaban fósforos. Hasta que descubrió el mundo el póker por internet. Hoy juega unas 4 horas diarias on line y en una mesa real juega unos cuatro o cinco días a la semana.
Hace unas semanas, De Souza resultó ganador de un torneo clasificatorio que se realizó en la Asociación Civil de Póker Texas Hold'em de Argentina (APTHA), miembro de la Federación Internacional de Póker. Gracias a eso, será el representante argentino en asistir al campeonato mundial este sábado 19 y domingo 20 de noviembre.
El presidente de APTHA, Carlos González, asegura que la asociación fue creada hace más o menos dos años, precisamente con la finalidad de proclamar el póker como "deporte mental" en el país e institucionalizarlo para que se puedan generar "competencias entre provincias y a nivel metropolitano". Cuando se le pregunta cuál es la diferencia entre el póker considerado como un juego de azar o como un deporte mental, señala: "No es lo mismo que unas 10 personas tienen X cantidad de dinero que una mesa de póker donde juegan personas con la misma cantidad de fichas y circunstancias".
González destaca que en este último caso, "la parte analítica, estratégica y mental" tiene más influencia que el dinero en el tipo de juego que ellos promueven.
Luego cuenta que la idea de la asociación es incentivar a este deporte mental desde los 18 años, para lo cual, incluso, abrirá una escuela de póker, como sucede con otros deportes como el fútbol. Y asegura que el póker, desde esta perspectiva, va creciendo mucho en el país, y que actualmente hay aproximadamente entre 500 y 700 mil personas que juegan "esta disciplina". En el mundo, en tanto, se calculan cerca de 1.500 millones de jugadores de póker.
Otro jugador reconocido en APTHA es Bernardo Abramovich, de 58 años, quien empezó a jugar en su adolescencia con amigos, pero que con el tiempo eso "se fue desvirtuando", entonces lo dejó. Hace algunos años se volvió a enganchar en un crucero, y desde entonces disfruta de ese juego, acompañado por su familia. Hace pocas semanas, se consagró campeón de uno de los torneos más reconocidos de la región: el Conrad Poker Tour 2011, en Punta del Este, en el que obtuvo un premio millonario.