Por más que a veces no lo parezca, Martín Lousteau busca estar en armonía con la naturaleza. Al menos, en lo que a su propio cuerpo respecta. Y es que ese es uno de los grandes objetivos que propone la quiropraxia, disciplina creada hace ya más de un siglo en los Estados Unidos a la que el ministro viene apelando como método para combatir las tensiones diarias.
Desde hace varios meses, en efecto, el funcionario concurre todas las semanas a sesiones en el centro Casa de Vida , creado y atendido por los chiropractors norteamericanos David Serio y Craig Ingram Penny.
Ambos profesionales llegaron a la Argentina hace siete años, tras egresar de dos prestigiosas casas de estudio de su país: la Escuela Sherman de Straight Chiropractic y la Life University .
En Estados Unidos, la quiropraxia es una ciencia muy difundida, a tal punto que es normal escuchar menciones al tema o ver incluso escenas en las que aparecen chiropractors en series como Seinfeld y películas de Hollywood.
En la Argentina, en cambio, si bien muchos kinesiólogos, masajistas y osteópatas dicen hacer "quiropraxia", son contadísimos los especialistas que hayan estudiado seis años para ello como Serio y Penny, quienes disponen de tres consultorios para la atención de sus pacientes: uno ubicado en el Centro, otro en Belgrano y un tercero en San Isidro.
El elegido por Loustau es el del Centro, ubicado a pocas cuadras del Ministerio de Economía, en un pequeño departamento de la calle Talcahuano entre Paraguay y Marcelo T. de Alvear.
Allí concurren también entre muchos otros pacientes Hugo Santilli (otrora presidente de River y titular del Banco Nación durante el menemismo), el actor Boy Olmi -quien oficia de presentador en el video que los asistentes ven antes de su primera sesión- y un interesante número de extranjeros residentes o de paso en la Argentina, la mayoría estadounidenses.
* Redactor de Perfil.com