SOCIEDAD
depende del ministerio de educacion y es gratuita

Cómo funciona la ‘Universidad del Tango’ que enseña los secretos de la música porteña

El Centro Educativo del Tango (Cetba) está en San Cristóbal y otorga títulos de instructor de danza y ‘DJ’ de milonga. Con clases teóricas y prácticas, recibe alumnos de todo el mundo.

20190707_cetba_universidad_escuela_tango_cuarterolo_g.jpg
En la pista y en el aula. Los cuatro docentes muestran los pasos y los alumnos copian. La poética forma parte de la currícula teórica. Las chicas practican entre ellas, y todos aprenden los dos roles de la pareja. | Cuarterolo

Barrios de tango casi por excelencia, Almagro, San Cristóbal y Balvanera representaron desde siempre, y como pocos, lo mejor del espíritu porteño. Por lo tanto, no resulta extraño que en el límite donde se unen, en Agrelo al 3200, funcione el Centro Educativo del Tango de Buenos Aires (Cetba), la denominada Universidad del Tango.

Se trata de un espacio educativo no formal, pero que depende del Ministerio de Educación porteño, que fue fundado en 1992 por la pareja de bailarines de tango compuesta por Gloria y Rodolfo Dinzel. Referentes indiscutidos de esa disciplina, y creadores del Sistema Dinzel. Un método de enseñanza de la tradicional danza porteña que nació a partir del estudio y decodificación de ese arte popular. Los Dinzel, por otra parte, integraron el elenco que presentó el espectáculo Tango Argentino en Broadway, desde 1985 a 1989, el espectáculo coreográfico que sirvió para relanzar el tango a nivel mundial otra vez.

Además de enseñar a bailar tango a partir de ese método, en el lugar, que funciona en horario nocturno en la Escuela República del Paraguay, también se dictan clases de Historia y Panorama Actual del Tango, de Letrística y Poéticas de la disciplina, y Musicalizador, DJ (ver aparte). Las actividades son gratuitas y abiertas a todas las edades. “Los alumnos que egresan cuentan con las herramientas necesarias tanto para ser instructores de tango como para armar o musicalizar una milonga”, afirma Alejandra Codazzi, coordinadora del Cetba. “En total asisten entre 350 y 400 alumnos, muchos de los cuales son extranjeros. Aprenden a bailar tango y después lo enseñan en sus países. Hay franceses, alemanes, españoles y colombianos, entre otros. El lugar, además, se caracteriza por enseñar ambos roles de la pareja de baile a los alumnos”, agrega.

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

Allí se vive el tango de una manera muy especial, tal como si se tratara de una carrera universitaria tradicional. El nivel de los profesores, todos relacionados con la disciplina, como el interés que despierta en los alumnos se percibe en las aulas y pasillos. En el salón de actos de la escuela, por ejemplo, los alumnos “le sacan viruta al piso” o ensayan los pasos aprendidos en la clase anterior. Otros, en cambio, usan como pista los amplios pasillos de la escuela porteña.

El equipo de trabajo del Cetba se completa con Eric Dinzel, al frente de la dirección de Tango Danza; Laura Murphy, en la misma especialidad; Gabriel Soria, presidente de la Academia Nacional de Tango, coordina el Instructorado Tango Historia; y Juan Pablo Güerri, se encuentra al frente de la asesoría pedagógica del lugar. Matías Mauricio, dirige, en tanto, las clases de Poética y Letrística del tango. La directora del Museo Casa de Carlos Gardel, Marina Cañardo, dicta materias en la cátedra de Historia del Tango.

“Más allá de las clases dictadas por los docentes, aquí se realizan clases magistrales con verdaderos referentes del tango. La semana pasado, por ejemplo, no visitó el compositor José Colángelo, que recordó sus años de docente en el Cetba. “La semana que viene esperamos a Carlos Rivarola, un gran bailarín que también integró Tango Argentino”, apunta, por su parte, Güerri, que también enseña danza tango y fue discípulo de Los Dinzel. “El tango está viviendo un momento de eclosión similar al de principios de los 90, cuando Gloria y Rodolfo fundaron este lugar. Es una apuesta muy fuerte en el tango que refleja el buen momento que pasa otra vez la disciplina con las milongas y los jóvenes a la cabeza”, agrega.

“Ahora sumamos el ballet-escuela que lo forman alumnos y ex alumnos de la institución. Además de ser una práctica, también sirve para bailar profesionalmente. Se hizo una convocatoria y quedaron doce parejas”, explica Dinzel.

Por último y respecto a la creación del Cetba, Dinzel cuenta que todo surgió a partir de las ganas de sus padres de enseñar tango. “Tenían una mirada única de este arte que les permitió decodificarlo y enseñarlo a partir del sistema que crearon. Decodificaron un arte popular y supieron transmitirlo con la finalidad de que perdure en el tiempo. Y creo que lo lograron”, agrega el experto.

 

“El disc-jockey debe conocer cuál es el perfil de la milonga”

Junto con la creación del ballet escuela, este año se creó la carrera de Musicalizador de Milongas o DJ de Milongas. Una especialidad que nació a partir del buen momento que viven estos locales.

La materia es dictada por Mariano Romero, quién además de musicalizar milongas desde hace diez años, también es bailarín profesional. Actualmente la cursan unas 25 personas.

“Vuelco mi experiencia en la materia. Enseño desde la tradición de baile, es decir las orquestas que no pueden faltar, hasta las que suenan actualmente en las milongas”, explica el profesor. “Los alumnos tienen que saber que en una milongas no pueden faltar temas de las orquestas de Aníbal Troilo, Juan D’Arienzo, Osvaldo Pugliese, y Carlos Di. Son orquestas troncales que no pueden faltar nunca, ya sea con temas instrumentales o cantados”, agrega.

“Tienen que aprender a armar las tandas de temas de acuerdo al perfil de la milonga y para eso, las divido en milongas del Centro, en las que se baila más rápido, por una cuestión de espacio físico, y en barriales o periféricas. Cuyo espacio es más amplio y el paso es un poco más cansino y aletargado. Se trata de las milongas de los barrios de Saavedra, Villa Urquiza o Agronomía, por ejemplo. Los alumnos tienen que saber ordenar los temas en tandas, ya que no se pueden mezclar temas románticos con canciones de pasos más rápidos”, puntualiza.

Más allá de estos temas, Romero también enseña todo lo relacionado con la instalación de los equipos. “Les explico cómo operar el programa de DJ para que sepan dividir los canales de sonido. También cómo conectar los cables y quemar las consolas o los parlantes”, cierra el DJ Milonguero.