El dueño del local donde funcionaba Cromañón, Rafael Levy, fue condenado hoy a cuatro años y medio de prisión. El Tribunal Oral Criminal 24 resolvió además absolver al ex secretario de Seguridad porteño Juan Carlos López, quien era su segundo Enrique Carelli y al ex director de Seguridad Privada Vicente Rizzo.
Frente a la impotencia de familiares de las víctimas, el ex comisario Gabriel Sevald, acusado de haber recibido coimas para no inspeccionar el local y que pueda funcionar con exceso de público, también fue absuelto.
Nilda Gómez, madre de una de las víctimas de Cromañón, advirtió hoy que el Tribunal Oral Criminal 24 "hizo lo que quiso, como en el primer juicio" al condenar a cuatro años y medio a Rafael Levy y absolver al resto de los imputados.
"El tribunal hizo lo que quiso, como en el primer juicio", sostuvo Gómez, y dijo que "el problema es un poder judicial corrupto y un poder político corrupto".
"Es una Justicia que deja de lado a las víctimas", manifestó Gómez.
Levy, único de los cinco imputados que hizo uso del derecho a pronunciar las últimas palabras ante el tribunal antes del veredicto, replicó a los querellantes que nunca fue "huidizo" respecto de la investigación y dijo que "siempre" estuvo a disposición de la Justicia.
Este juicio comenzó en marzo, en el que el fiscal de la causa, Jorge López Lecube, explicó que era para determinar qué responsabilidad les cabía a estas personas que habían sido imputadas por estrago doloso y el pago y cobro de coimas.