Crece la confusión sobre el bebé que nació con cinco meses y que habría sido dado por muerto: Carlos Ramos, director del hospital bonaerense "Enrique Erill" de Escobar, negó ante la prensa la versión de la familia del niño, y aseguró que los médicos no les informaron que estaba muerto sino que se les explicó que estaba grave.
"No se le dijo que estaba muerto, se le dijo que el bebé estaba muy mal. De hecho está muy mal. Nació de 24 semanas y con 550 gramos, lo que hace que sea un bebé de altísimo riesgo", explicó Ramos en declaraciones a la prensa.
Además, aseguró que habló con la madre de Jesús y que ella le manifestó que "no vio que el bebé estuvo tirado, muerto y sin asistencia", como denunció una de las tías del recién nacido, Marisa Pomer.
Pomer contó ayer y - y lo ratificó esta mañana- que le habían informado que el bebé, que nació por cesárea a los cinco meses de gestación por complicaciones en el embarazo, estaba muerto. "La partera me dijo en la cara que estaba muerto" y hasta "le dijo si quería ver el cuerpito (a la madre del bebé) y ella le dijo que no".
Ramos salió después a desmentir la versión ante la prensa. Dijo además que el bebé está internado en grave estado en terapia intensiva en el área de neonatología, y aseguró que por los pocos meses de gestación del niño, existe una gran “dificultad para sobrevivir”.