Un incendio destruyó hoy una fábrica de productos plásticos en el partido bonaerense de Avellaneda, donde tuvo que ser evacuada una manzana. Un vecino y tres bomberos fueron asistidos con principio de asfixia, mientras otros 4 sufrieron heridas al chocar el autobomba en la que se dirigían al lugar.
El siniestro comenzó poco antes de las 9, en un depósito de la firma Soyuz, en Helguera 715 de la localidad de Gerli, en el sur del conurbano, donde las llamas llegaron a los 40 metros de altura y el intenso humo negro podía observarse desde los barrios de Constitución y San Telmo, en el sur de Capital Federal.
El fuego fue circunscripto a las 11, aunque personal de bomberos continuaba trabajando para sofocar las llamas que quedaban debajo de un tinglado que se cayó como consecuencia del incendio, informó el jefe de bomberos de Lanús Oeste, Carlos Felicioti.
Pese a la magnitud del siniestro, en el que trabajaron 20 dotaciones de bomberos de Avellaneda, Sarandí y Lanús Oeste, no hubo heridos entre los empleados de la fábrica, debido a que la firma dispuso un plan de evacuación, informaron fuentes de Defensa Civil de la provincia de Buenos Aires.
Cuando comenzó el fuego los vecinos se autoevacuearon y la escuela 60 -cercana al lugar- debió ser desalojada por prevención, precisaron las fuentes.
Tres bomberos y un vecino sufrieron principio de asfixia y fueron asistidos en el lugar.
Otros cuatro bomberos resultaron heridos cuando el autobomba en el que se trasladaban desde Sarandí hacia Gerli chocó contra un colectivo en Villa Domínico, partido de Avellaneda.
Guillermo Solito, encargado del depósito Soyuz, ubicado a una cuadra de la planta de la empresa, dijo entre lágrimas que "las pérdidas son totales" y precisó que en el lugar había "carcasas de plástico para la fabricación de baterías".
Consultado acerca de las causas que originaron el fuego, respondió que se investigarán, aunque advirtió que "puede que el incendio haya comenzado por la caída de un rayo, porque llovía mucho".
Personal de bomberos permanecía esta tarde en el lugar, donde realizaba tareas de apuntalamiento de las medianeras, para evitar el derrumbe de las paredes, mientras los vecinos aún no podían regresar a sus viviendas.
Fuente: Télam