Ocho años atrás se conoció la disputa por un loro llamado Paquito, en Córdoba. La mujer había iniciado un litigio judicial por la tenencia del ave cuando se separó de su esposo y reclamó la devolución del animal para su hija menor, la más afectada por la pelea. En cambio, la fiscal Jorgelina Gutiez le atribuyó la propiedad del loro al ex marido, que se lo llevó a su nueva vivienda cuando el matrimonio se divorció. Su ex esposa, aludiendo “problemas psicológicos” de la hija, fue al domicilio de éste y se llevó a Paquito, pero días después debió restituirlo por orden de la Justicia. La fiscal imputó a la mujer el delito de robo agravado. El caso se resolvió con un régimen de visitas de la hija a la mascota