“Hay sitios hermosos como Bahamas, pero allí sólo tienes la playa con una palmera y cuatro cocos. No hay otro lugar en el mundo que combine la vida de aquí con un entorno con campo, playas y mar. Por eso cuando decidimos invertir en Sudamérica nos decidimos por Punta del Este, un lugar con una energía especial. Además, entre los visitantes europeos y sudamericanos se genera una mezcla vibrante”.
Para el empresario español Jorge Iglesias (31), socio de la desarrolladora IAGroup, responsable del proyecto Laguna State, estas playas no son una novedad. Hace ya más de 15 años que su padre, Carlos, y su tío, el célebre Julio Iglesias, le hicieron conocer este lugar que hoy es uno de sus principales mercados.
—¿Punta del Este es un destino que puede competir con otros balnearios del mundo?
—Claro, ya que está a la altura de los Hamptons, las playas del sur de Francia o las de Marbella. Tiene muchas ventajas frente a otras ciudades balnearias del mundo. Aquí hay seguridad, limpieza, el tráfico está controlado. Si vas a Saint Tropez y quieres entrar al puerto de Mónaco tardas cuatro horas. Y aunque puede tener algunos defectos como toda población que crece rápido, sólo en La Punta hay edificios de altura. En cambio Benidorm, en España, parece Nueva York en la playa.
—¿Hay diferencias entre el público europeo y el latino?
—Cada vez vienen más europeos, italianos, suizos, españoles. Esto está generando un mercado más sofisticado, porque es un público que si bien está dispuesto a pagar, también es exigente. Creo que aquí empiezan a darse cuenta de que para poder cobrar altos precios hay que darles un valor añadido.
—Algo que no ocurrió con la visita de Ralph Lauren
—Gente de su entorno me ha dicho que si bien le ha gustado mucho el sitio, no ha tenido buenas experiencias con la prensa, la gente. Creo que hubo fallas en la organización de su visita. Su casa estaba muy dentro de La Barra y tuvo problemas para moverse.
— ¿Es para este tipo de público que desarrollaron Laguna State?
—Pensamos en un público europeo, entre 50 y 70 años que busca la tranquilidad de las playas y la belleza del campo, en un entorno controlado. En 110 hectáreas instalaremos 10 chacras marítimas con un servicio de hotel 6 estrellas y seguridad las 24 horas. Los que vienen acá quieren disfrutar y despreocuparse de todo. Por eso le brindaremos varios servicios premium.
Negocios de familia. A pesar de su apellido y su innegable parecido físico, se resiste a hablar de su tío y sus primos famosos. Hace seis años que trabaja en el negocio inmobiliario junto a su padre y sus dos hermanos. Explica cómo es esto de trabajar entre Iglesias: “A ninguno se nos dio por lo artístico, porque en esta faceta estamos cubiertos en la familia. Trabajar juntos es todo ventaja, nos conocemos y nos llevamos bien. Antes trabajé casi tres años en la empresa de management de artistas de mi tío Julio, que es muy exigente y super perfeccionista. Mi padre es igual, pero en otro rubro”.
—Se dice que su tío está construyendo una casa en su complejo...
—Eso no es cierto. También han dicho que Armani venía a comprar una propiedad. Lo que pasa es que la gente inventa cosas, por aburrimiento. Sí es cierto que la nuestra es una familia súper unida, pasamos Navidades todos juntos. Hablo cada semana con mi primo Enrique, así que lo más probable es que en algún momento, a pesar de que cada uno tiene sus compromisos, coincidamos en este balneario.