La Cámara de Apelaciones en lo Penal, Contravencional y de Faltas de la Ciudad ordenó en horas de la tarde de ayer el desalojo de la Sala Alberdi del Centro Cultural General San Martín y su allanamiento para identificar a los okupas que aún se encontraban en el lugar. Fuentes judiciales indicaron que así lo ordenó la Cámara con las firmas de los jueces Elizabeth Marum, Marcelo Vázquez y José Saez Capel, quienes rechazaron la apelación presentada por los ocupantes del lugar y ordenaron el allanamiento y el desalojo del lugar ubicado en Sarmiento 1551, algo que ya había solicitado la fiscal Claudia Barcia.
Según pudo averiguar PERFIL, actualmente la sala se encuentra ocupada por unos diez talleristas que se encuentran en el sexto piso del complejo cultural, mientras que entre treinta y cincuenta activistas resisten acampando en la puerta del lugar.
La resolución que ahora adoptó el Poder Judicial porteño será “en el modo que fije el juez, debiendo dar intervención a los organismos del GCBA que correspondan; teniendo en cuenta que la legítima recuperación de espacios públicos sea llevada a cabo cuidando de respetar los derechos de las personas a desocupar”.
En este sentido, fuentes del Gobierno de la Ciudad aseguraron que este fallo “cambia todo, y se fundamenta en cuatro pilares: la comisión de un delito, el desalojo de la sala, la identificación de los okupas y que se le dio intervención al Gobierno porteño, Es muy clara la normativa”. En esta dirección, y consultado al respecto, el ministro de Cultura de la Ciudad, Hernán Lombardi, señaló que “el Ejecutivo porteño va a seguir sujeto a lo que marque el Estado de Derecho”.
Por su parte, desde la Policía Metropolitana aseguraron a PERFIL que “aún no sabemos si tenemos que intervenir o no ni cuándo, sobre todo porque el juez de la causa todavía no se expidió”.
Ramiro Yordan, uno de los talleristas de la sala que permanecen en el hall de entrada del centro cultural, afirmó que “la orden de desalojo no es ninguna novedad. No nos inquieta en absoluto. Ya son habituales estas decisiones”. El joven sostuvo además que “vamos a resistir esa orden sin generar violencia de nuestra parte y apelando a la solidaridad de vecinos, artistas y organizaciones sociales con marchas y espectáculos callejeros, tal como ocurrió hace diez días”.
La Sala Alberdi se encuentra tomada desde 2010, y en la madrugada del miércoles 13 de marzo la Policía Metropolitana, en un intento de desalojo, detuvo a cuatro manifestantes –otros 16 resultaron heridos– que se resistían a abandonar la sala y el hall de entrada.