Los tonos rubios son un clásico asociado a la belleza más perfeccionista y sensual y hoy simbolizan diferentes cualidades porque se amplió la forma de usarlos. Comenzando por Madonna, que a fines de los ´90 decidió dejar a la vista sus raíces oscuras y su rubio gastado, pasando por los platinados más artificiales o los femeninos reflejos dorados, los rubios permiten creatividad.