El jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, vetó la ley que por unanimidad sancionó la Legislatura para limitar la construcción de torres en el barrio de Caballito. La decisión, publicada en el Boletín Oficial, fue rechazada por el ex jefe comunal y referente de Diálogo por Buenos Aires, Aníbal Ibarra, quien acusó al Ejecutivo porteño de "privilegiar, como siempre, los negocios por sobre los intereses de los vecinos", y generó críticas de la bancada de la Coalición Cívica. La medida debe ser nuevamente tratada ahora en la Legislatura, que necesita dos tercios de sus miembros (40 votos), para ratificarla. Si no los consigue, el veto quedará firme. La decisión de Macri, que está en China, provocó desconcierto en su propio bloque, que se ve ahora ante el dilema de tener que votar entre lo que piden los vecinos y la orden de su jefe político.
En la medida adoptada por Macri se veta la limitación de la construcción en altura en zonas circundantes al Hospital Durand, delimitadas a grandes rasgos por las avenidas Acoyte y Díaz Vélez, y las calles Acevedo y Aranguren. Ibarra recordó que "la ley vetada por el gobierno porteño fue votada por unanimidad en la Legislatura y tenía como objetivo poner un límite de altura a la construcción en unas 80 manzanas en el barrio de Caballito". "Este fue y es un reclamo de los vecinos, lo que está haciendo Macri no es otra cosa que desatender ese reclamo para beneficiar a empresas de la construcción", afirmó Ibarra. "Este veto provoca que se generen nuevos espacios para millonarios negocios inmobiliarios, justamente en una de las zonas más buscadas para la construcción, que es Acoyte y Díaz Vélez", advirtió Eduardo Epszteyn, titular de Diálogo por Buenos Aires.
"El polígono vetado tiene una superficie aproximada de 60 mil m2, donde se pueden construir en total 180 mil m2. Con el proyecto de los vecinos, la superfice construible bajaba a 72 mil m2. O sea, que hay una diferencia aproximada de 100 mil m2. Si suponemos que 1 m2 en el mercado se vende a 1.500 dólares, la diferencia teórica en el precio de venta final es de 15 millones de dólares", aseguró el legislador.
Epszteyn consideró que "el argumento de que en este polígono funcionan el Hospital Oncológico, el Observatorio y el Museo de Ciencias Naturales, y es un área de transición con un distrito residencial, es muy débil. Se trata más bien de mantener una superficie rentable para especulación inmobiliaria".
Por su parte, la legisladora Teresa Anchorena, de Coalición Cívica, criticó que el veto haya recaído sobre una ley que "fue consensuada con todos los bloques y los vecinos de Caballito" y que apuntaba a "preservar la zona ubicada alrededor del hospital Durand y autorizaba construcciones de hasta 12 metros de altura". Para la diputada, la resolución de Macri, que debe ser refrendada por la Legislatura, "va a afectar significativamente la calidad de vida" de los vecinos de esa zona de la Ciudad.
Fuente: DYN