Un protesta gremial del personal de rampa y de los pilotos generó esta mañana la cancelación de un vuelo y el retraso de la salida y la llegada de nueve aviones de Aerolíneas Argentinas en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza Ministro Pistarini, lo que afecta a más de mil pasajeros que se encuentran varados. Pasadas las 10.30, la situación comenzaba lentamente a normalizarse.
Tanto el gremio que agrupa a los pilotos como el personal de rampa trabajaban a reglamento por distintos reclamos: mientras los primeros piden que por vuelo salgan cuatro pilotos en vez de tres, los trabajadores de carga reclaman el pago de un plus acordado a fin de año en concepto de vacaciones.
Según informó Canal 13, el personal de rampa pide el mismo aumento que le dieron a los empleados de Intercargo, es decir un adicional por las vacaciones de 1200 pesos. El Ministerio de Trabajo dictó por su parte la conciliación obligatoria en ambos casos.
En el lugar hay un importante operativo de seguridad de la Policía de Seguridad Aeronáutica.
Muchos pasajeros manifestaron su molestia con al situación, ya que algunos están perdiendo conexiones y reservas de hoteles.
Según informó Aeropuertos Argentina 2000 en su sitio en Internet, el vuelo 1250 previsto para las 6.10 a Río de Janeiro debió ser cancelado, en tanto que servicios a Miami, Bogotá, Santiago de Chile, Asunción, El Calafate y Ushuaia estaban demorados, en algunos casos por más de siete horas, lo que generó reclamos indignados de los pasajeros.
El vuelo 1372 con destino a Bogotá previsto para las 8 fue reprogramado y, según contó a la prensa una pasajera indignada, la compañía dispuso que salga recién a las 16 hacia Colombia.
El vuelo 1302 hacia Miami que debía partir a las 2.15 de la madrugada fue reprogramado para las 9 de la mañana, pero, pasadas las 10, todavía no había partido.
El vuelo 1240 a San Pablo que debía partir a las 6.50 lo hizo a las 9.16, con dos horas y media de demora, lo que generó malestar en los pasajeros que, en este caso, sí pudieron abordar la aeronave.
Fuente: DyN y Télam