Dos siameses unidos a la altura de la cintura, en la región hepática, nacieron hoy en la ciudad de Granadero Baigorria, vecina a Rosario, y se encuentran en buen estado de salud, por lo que en los próximos días serán separados, informaron fuentes médicas y familiares.
Los bebés, llamados Lucas y Darío, nacieron esta mañana por cesárea tras ocho meses de gestación, en el hospital Eva Perón de esa comuna que limita con el norte rosarino.
El padre, Gabriel Lodi, de 52 años, es un mecánico dedicado a mantenimientos de la ciudad santafesina de Las Rosas, a 120 kilómetros al norte de Rosario. La madre, Patricia, de 34 años, permanecía en buen estado de salud, en tanto según el informe médico que recibió Lodi, sus hijos Lucas y Darío podrían ser sometidos mañana o el sábado próximo a una intervención quirúrgica para separarlos.
"Cuanto más tiempo pase, mejor, porque no tenemos que olvidarnos que son chicos prematuros, que nacieron pesando casi 3 kilos entre los dos y que ahora se hallan asistidos con respirador mecánicamente en la sala de Neonatología", explicó el padre.
La misma opinión dio el obstetra Pablo Schlaen, quien tuvo a su cargo el alumbramiento, que fue por cesárea. "Yo estoy en este hospital desde hace 17 años y esta es la primera vez que en ese período se produce un nacimiento de siameses; una rareza, ya que, para dar un ejemplo, de cada millón de nacimientos puede darse un caso de siameses", comentó.
Tras especificar que la cesárea duró 40 minutos, Schlaen dijo que "la operación para separar a los pequeños dependerá ahora de un cirujano pediátrico; se está evaluando si esa operación podría hacerse mañana. Nosotros lo que hicimos es sacar a los gemelos del seno materno y entregarlos de la mejor manera posible".
La madre, expresó: "me siento más bien que nunca; ahora son cinco los hijos que me tocará criar, pues tengo a otros tres, aunque ya son más grandes", en referencia a Antonella Joana, de 13 años; Johnatan Gabriel, de 10, y Santiago David, de 8.
"Los médicos me dijeron que si todo va bien, entre mañana y pasado mañana nos darán el alta", amplió confiada la madre, quien sabía de la existencia de los siameses desde el quinto mes de gestación. "Después de las 20 semanas me hicieron una ecografía y apareció la sorpresa: estaban abrazados, uniditos", sintetizó la mujer.
El proceso de desarrollo ocurre por un e rror en la división de las células de los gemelos producto de un mismo óvulo y un mismo espermatozoide. La división de los embriones de gemelos normales ocurre en los primeros diez días después de la fecundación. Pero en el caso de siameses la división de embriones ocurre más tarde, sobre el decimotercer día y el retraso permite que no se dividan correctamente y compartan órganos.
Fuente: Télam y DyN