Médicos y otros profesionales de los hospitales públicos porteños realizan hoy un paro de 24 horas en repudio a las agresiones que reciben de pacientes y familiares en servicios de guardia y atención domiciliaria, por lo que reclamarán medidas de seguridad.
En la provincia de Buenos Aires, médicos y otros trabajadores de hospitales públicos afiliados a Asociación Sindical de Profesionales (ex Cicop) también paran durante cinco horas para denunciar el "colapso en la salud pública", informaron en un comunicado de prensa.
El secretario general de la Asociación de Médicos Municipales de la Ciudad de Buenos Aires, Abel Kohan Miller, dijo que "el reclamo es de mayor seguridad y soluciones a los problemas que hacen aumentar el estado de inseguridad de los médicos en los hospitales y en la atención domiciliaria".
La entidad, que agrupa a unos 9 mil médicos en la ciudad de Buenos Aires, realiza un paro de 24 horas que comenzó a las 7, con el cumplimiento de guardias mínimas en los hospitales y centros de atención primaria de la salud.
La medida de fuerza también es cumplida por la Federación de Profesionales del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
"Pedimos seguridad ante los hechos de violencia cotidianos y planteles de profesionales, acordes a las necesidades de la atención sanitaria de la población", manifestó la entidad que agrupa a profesionales porteños.
Kohan Miller explicó que los médicos son "la cara visible de un sistema de salud que está desbordado" y sostuvo que "la gente reacciona agrediendo a los profesionales, cuando en realidad, el problema es de fondo".
"Este es un problema que viene desde hace tiempo, tuvimos algunas reuniones con funcionarios de la Ciudad, pero no hubo muchas respuestas, por eso esta medida de fuerza", remarcó.
El dirigente expresó que "es necesario contratar el servicio de agencias de seguridad para los hospitales públicos" y agregó que "la mayoría tiene contratado personal que no evita los problemas, porque son ineficaces o no tienen consignas claras".
"Los médicos tienen que trabajar en condiciones precarias porque no funcionan los aparatos, no hay camas disponibles, y pocos recursos humanos, y a todo esto se agregan los problemas de la violencia", dijo.
La entidad afirmó que "hechos brutales, como el sucedido en la noche del 9 de agosto pasado cuando un médico de urgencias del SAME fue agredido físicamente y arrojado por las escaleras durante un auxilio domiciliario, padeciendo traumatismos múltiples y pérdida de conocimiento, han colmado nuestra tolerancia".
Las agresiones que reciben los médicos por parte de pacientes y familiares en servicios de guardia y atención domiciliaria fueron denunciadas por la asociación el 26 de julio.
En esa oportunidad, la entidad pidió a la población que "no nos agreda, porque los médicos no somos responsables si no hay medicamentos para entregar o si no pueden comunicarse por teléfono con las guardias o por demoras de las ambulancias".
"Son falencias del sistema", había afirmado la organización.
Fuente: DyN.