Tal como estaba previsto, ayer por la tarde se realizó en la Legislatura porteña la primera jornada de la audiencia pública por el destino de la ex Ciudad Deportiva de Boca Juniors. En ese predio de 71 hectáreas, IRSA, la desarrolladora del Grupo Elsztain, pretende levantar un complejo de torres de hasta 45 pisos, calles internas y áreas comerciales. En ese terreno, además, se construirá un parque público de 47 hectáreas, cuya construcción y mantenimiento estará a cargo de la desarrolladora.
En la audiencia, que se realizó bajo la modalidad virtual, se inscribieron 2.593 ciudadanos que expondrán sus argumentos a favor o en contra del proyecto a lo largo de 14 jornadas, hasta el 8 de noviembre. La audiencia pública y la segunda lectura de la norma son pasos obligatorios que se deben cumplir antes de aprobarse una ley que modifique el espacio público.
En esta primera jornada participaron 24 expositores, entre funcionarios, especialistas y comuneros, que defendieron la propuesta. Luego lo hicieron setenta oradores que se inscribieron a través de una convocatoria abierta a toda la ciudadanía. Cada expositor tuvo cinco minutos para hablar.
Entre los primeros expositores que defendieron el cambio de usos del predio figuró Álvaro García Resta, secretario de Desarrollo Urbano de la Ciudad de Buenos Aires. “Vamos a recuperar 48 hectáreas para la Ciudad, que se van a convertir en un gran espacio público sobre el Río de la Plata”, aseguró el funcionario porteño. “Además de la creación del parque, se desarrollarán viviendas, locales comerciales y gastronómicos, y espacios de recreación. Esto significa más desarrollo para la zona, más trabajo, más movimiento y más seguridad”, agregó.
Según García Resta, “la empresa va a financiar las obras de infraestructura necesarias para la urbanización, el mantenimiento del parque por diez años y otorgará un presupuesto especial para el Fondo de Desarrollo Urbano Sostenible y otro destinado a innovación, ciencia y tecnología”.
El predio de la ex Ciudad Deportiva de Boca es el más grande de la ciudad que está en manos privadas y, según las normas vigentes, está habilitado solo para actividades deportivas. En este sentido, el secretario de Desarrollo Urbano recordó que el terreno “está en desuso desde hace casi treinta años”, y agregó que “en los últimos años, se recuperaron espacios abandonados para que los usen miles de personas, como la Manzana 66, Parque de la Estación o el Elefante Blanco”.