El debut de Chiche Gelblung en la segunda mañana de Mitre confirma, una vez más, que los volantazos ya son una necesidad en esa radio: el primer intento después del fallecimiento de Néstor Ibarra (bastonero impecable y con estilo propio) se llamó Animados. Un producto que podría haberse sostenido en el tiempo de no ser por el desorden que la gerencia provocó en los meses posteriores con el recambio de figuras, columnistas fijos sin espacio y humor hasta el hartazgo.
Luego vino el experimento de Dady Brieva que, como se preveía, falló rotundamente y se llevó puestos a los encargados de destrozar la grilla. Ahora que Gelblung es parte de la emisora de Clarín, las posibilidades de levantar el share mensual están más cerca si se tiene en cuenta que el pase de Esteban Mirol a la AM 790 compensó las pérdidas de la noche y permitió una competencia de minuto a minuto (según Ibope, la Diez tiene el 36.62% del share del último trimestre por sobre el 17.51% de la cosecha de Mitre).
Hola, Chiche incluye el mismo equipo que Gelblung tenía en Radio 10 sólo que algunos (nuevos) integrantes fueron impuestos por Mitre: el inefable Horacio Pagani, el humorista Ariel Tarico, Silvia Naishtat y Marcela Giorgi más el fuerte del informativo con movileros desperdigados en la calle. En su primera emisión, Chiche dialogó con Brieva sobre el espacio que dejó y lo que viene, y con Marta, la esposa de Ibarra, que recordó el segmento que popularizó su esposo en sus años al frente de Hoy por Hoy. Cerca del final, Adrián Suar, le dio la bienvenida y lo despidió diciendo "nos vemos en el canal".
Nada nuevo bajo el sol. Se trata de un envío matutino de Edición Chiche anegado de risotadas pero con chances de agilizar esa franja horaria. Experiencias anteriores en Mitre indican que no es bueno repetirse. Hacen falta móviles, producción, informes y menos carcajadas para desbancar a la competencia. El tiempo dirá qué prioriza Gelblung.
* Redactor de Perfil.com