Un bebé lloraba de hambre y una mujer policía decidió amamantarlo

Una oficial de la Policía Bonaerense que realizaba un servicio de adicional en el hospital de Niños de La Plata pidió permiso y amamantó a un bebé que no paraba de llorar porque tenía hambre. Fuentes policiales informaron que se trata de Celeste Jaqueline Ayala, numeraria del Comando de Patrullas de Berisso, quien el martes por la noche recorría el centro asistencial y halló al pequeño llorando. El bebé al que ayudó y alimentó Ayala quedó en observación en el Sor María Ludovica por presentar signos de desnutrición de larga data.

Ayala habló con los encargados del piso para pedir autorización para amamantarlo, ya que para ella tenía hambre, por lo que comenzó a darle el pecho y así calmar al bebé de su llanto. "Estaban en malas condiciones, con poca higiene, enfermedades de la piel, y bastante desorientados pero al menos estaban con el personal de la coordinación del Servicio Zonal” (de Promoción y Protección de Derechos del Niño, Niña y Adolescente), dijo Ayala.

"Cuando me enteré de que eran de Berisso, me acerqué y noté que el menor lloraba desconsoladamente; fui mamá hace poco, y me di cuenta de que tenía hambre, se llevaba la mano a la boca, así que pedí abrazarlo y amamantarlo".  “Fue un momento muy triste, me partió el alma verlo así; la sociedad tiene que sensibilizarse al máximo ante estas cosas que afectan a los nenes, no pueden seguir pasando” subrayó Ayala, de 27 años, quien vive en Berisso con su pareja y sus hijas de siete años y un año y medio.

Según la OMS y Unicef, amamantar tras el parto baja riesgo de muerte del bebé

“Estamos orgullosos de cómo estuvo a la altura de la situación; fue un gesto que confirmó su gran vocación de servicio, que es la esencia de la fuerza y que también ella demuestra asistiendo al curso para convertirse en bombero” subrayó el comisario inspector José Luis Coria, titular del Comando de Berisso: “creemos que es merecido el reconocimiento, y nosotros se lo brindaremos desde nuestro lugar”.

Autoridades del Municipio de Berisso, contaron al portal TN.com.ar que el Juzgado de Familia N°5 había resuelto separar a los seis hermanos de su mamá, que atraviesa una situación de vulnerabilidad extrema.

“El mayor de los seis tiene 9 años. Tuvimos una actuación de meses y lamentablemente no pudimos recomponer la situación de la mamá. Por eso hubo que hacer certificaciones de salud antes de llevarlos a alguna casa de abrigo. Cuando la mujer amamantó al bebé estaban a la espera de una respuesta en la guardia”, explicó uno de los funcionarios de la oficina. También contó que empezaron a hacer un seguimiento de esta familia meses atrás, cuando la mujer se acercó a una unidad sanitaria a pedir ayuda para poder darles de comer.

Desde la oficina de Berisso, señalaron que "estas medidas son horribles desde donde lo miremos, pero las circunstancias a veces hacen que este tipo de cautelares que toma la Justicia lleven por buen camino a una familia”.

Ahora habrá que esperar que el Juzgado defina si los seis nenes volverán con su mamá o cuál será su futuro.