De acuerdo a estudios científicos se calcula que para el año 2100, un tercio del planeta estará compuesto de zonas desérticas. Así lo aseguró un informe del Centro Hadley para la Predicción y las Investigaciones sobre el Clima, dependiente de la Oficina Meteorológica del Reino Unido.
Las investigaciones, que muestran por primera vez de manera cuantificada el riesgo de la sequía, describen cómo el cambio climático provocará “migraciones de los campesinos a niveles desconocidos hasta ahora” tanto que los países pobres “no podrán digerir”.
Asimismo el experto de la New Economics Foundation, Andrew Simms, manifestó que “no quedará salvo ningún aspecto de la vida en los países en desarrollo de confirmarse estos pronósticos”. Y agregó al respecto que “afectará su capacidad agrícola, además de la disponibilidad de agua”.
Por su parte, Andrew Pendleton, de la organización no gubernamental Ayuda Cristiana, dijo al diario The Independent de Inglaterra que este acontecimiento “es terrorífico” y manifestó que “equivale a una condena de muerte para millones de personas.”
La estimación climática fue posible gracias a la utilización de una super computadora que operó un sistema llamado Índice Palmer de Gravedad de la Sequía, que estima las variaciones del clima, además de clasificarlas.
En la actualidad, sólo el tres por ciento de la Tierra sufre sequías extremas, porcentaje que se traduce en áreas completamente inhabitables. Según estimó el informe del Centro Hadley, esta superficie desértica aumentará al 30 por ciento, afectando especialmente al continente africano.