Los adultos se convirtieron en los nuevos adictos a los videojuegos y desplazaron a los más chicos

“¿Otra vez volviste a las dos de la mañana?”, le preguntó con sarcasmo su mujer a Nicolás, un asiduo fanático de los videojuegos que, con 30 años a cuestas, todas las semanas se reúne con tres amigos de su misma edad después del trabajo para competir en interminables partidos de Winning Eleven, el jueguito de fútbol para consolas más vendido de la Argentina. “Me colgué jugando con los chicos”, se justifica él, cabizbajo, una y otra vez.

Nicolás es sólo un caso testigo de una tendencia muy marcada en los países desarrollados que empieza a cristalizarse en la Argentina: los adultos coparon el mercado de los videojuegos. Cada vez son más comunes los grupos de treintañeros (o de más) que se sientan en el sofá un sábado a la noche con el joystick en la mano, encandilados frente a la PlayStation –la consola líder del mercado local–, rodeados de cerveza y pizzas.

“Nos juntamos para hacer la previa antes de ir a tomar algo”, reconocieron varios jóvenes consultados.

“Para las nuevas generaciones, los videojuegos forman parte de su proceso de selección de entretenimiento para un fin de semana. Ahora eligen entre salir con amigos, ir al cine, tomar algo o un campeonato de fútbol en la consola”, explicó Tomás Oulton, especialista en entretenimiento de Microsoft. La razón, entre otras cosas, tiene que ver con que los mayores de 25 años son los mismos que en los ’80 vivieron el nacimiento de los primeros videojuegos, crecieron con ellos y hoy ya los tienen incorporados en sus hábitos culturales. “Nuestra salida con amigos es ‘la Play’ (así se le dice en la jerga)”, señala Paco, uno de los compañeros de juegos de Nicolás.

En crecimiento. Si bien en el país no hay datos concretos de la cantidad de jugadores, porque la cámara que representa a las empresas de videojuegos quedó casi sin funciones después de la crisis de 2001, fuentes de Sony y Microsoft estiman que existen al menos unas 400.000 consolas en toda la Argentina, desde las más antiguas hasta las más sofisticadas. Esta base aumentaría cada mes gracias al crecimiento inédito de las ventas: en la Navidad pasada sólo la PlayStation (de Sony) vendió 6.500 unidades en comparación con los 200 equipos que se comercializaron en todo 2005. Corresponde aclarar que ese número es del mercado “en blanco” que, según los analistas, representa sólo el 10% del real, diezmado por las ventas de equipos a través de sitios de subastas en Internet y el contrabando. Así y todo, las ventas de PlayStation crecen 25% anualmente.

Sony confirmó que cada vez son más los adultos que se enganchan con los videojuegos, algo que puede verificarse también en la aparición de títulos orientados a este público. Juegos de golf o propuestas como el EyeToy Kinetik, pensado para hacer ejercicio frente a la pantalla de la TV, son buenos ejemplos. “Este último es muy elegido por las mujeres y apunta a un target joven-adulto de más de 28 años”, aclaró Luis Massuh, gerente de marketing de Sony Argentina.

También los jueguitos basados en series exitosas como Lost, CSI o Amas de casa desesperadas, títulos inspirados en series para maduritos, no dejan de ganar fanáticos.

Jóvenes de ayer. “El promedio de edad de los jugadores argentinos hoy está en los 27 años o más y el 48% son mujeres”, confirma Eduardo Goyhman, presidente de Edusoft, empresa dedicada a la distribución de videojuegos. Aclara que opciones como Los Secretos de Da Vinci (basado en el best seller de Dan Brown) o Cámara Café, un simulador que emula lo que ocurre dentro de una oficina europea, se venden muy bien en el país. “Por lo general, los adultos buscan opciones que no necesitan mucha preparación del jugador: quieren juegos de disparos, de carreras de autos o de fútbol”, aseguró.

La de los videojuegos es una de las industrias más prometedoras de los negocios electrónicos.En el mundo mueve US$ 30.000 millones al año y en muchos casos está destronando a Hollywood como referente del entretenimiento (muchos juegos facturan en el primer día de ventas lo mismo que meses de funciones de películas). Por eso, cada día llegan más títulos y ofertas para seducir a los adultos de hoy, o a los jóvenes de ayer...

Los elegidos entre los más grandes
Explicar cuáles son los videogames preferidos entre los que ya no son chicos no es tarea fácil si se tiene en cuenta que por culpa del enorme mercado en negro argentino, los que más se juegan no son precisamente los más vendidos. Sin embargo, según varios especialistas consultados, el Winning Eleven, un realista simulador de fútbol para la PlayStation es uno de los más vendidos en el país, tanto por vías oficiales como extraoficiales.

En el ámbito de las computadoras hogareñas, según fuentes del mercado, The Sims, un simulador que permite a los usuarios “manejar” la vida de las personas creadas virtualmente para tal fin, es uno de los preferidos. Como no podría ser de otra forma para un país futbolero, el FIFA es otro realista simulador de fútbol que también lidera las ventas en el mercado argentino.