UNIVERSIDADES
Perfil Educación

Santiago O’Donnell: "Existieron presiones para que Mariano Macri cambie su testimonio"

El periodista participó del Ciclo de Entrevistas organizado por estudiantes de Periodismo de Perfil. El impacto político de su libro y cómo afectó al ex presidente Mauricio Macri. La relación profesional que tiene con su hermana, María O’Donnell.

Entrevista Santiago O'Donnell 20210416
Entrevista Santiago O'Donnell | Captura de pantalla

Santiago O’Donnell participó de una conferencia de prensa virtual organizada por estudiantes de Periodismo de la Escuela de Comunicación. El editor de Página/12 se refirió al cambio que evidenció Mariano Macri luego de la publicación de Hermano. “Quizá, la única manera que él tenía de contar lo que contó sin que lo compliquen económicamente, era a través de esta maniobra para no hacerse cargo de lo que dijo. No sé si fue por conveniencia, si es por necesidad legal, si es porque lo incentivaron, o si es porque lo asustaron”, aseguró.

El autor de otros best sellers como Argenleaks aseguró que su último trabajo obligó a al ex presidente Mauricio Macri a postergar la publicación de su autobiografía Primer tiempo y que tuvo un impacto político muy fuerte. “Creo que judicialmente, todavía va a dar mucho más”, advirtió O’donnell en el Ciclo de Entrevistas a cargo de Rodrigo Lloret, director de Perfil Educación.

—¿Primer tiempo, de Mauricio Macri, mejoró la imagen del ex presidente y considera que fue una respuesta a Hermano, el libro que usted publicó?

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

—No lo creo. Primer tiempo se inició antes de la publicación de Hermano. Lo considero más una respuesta a Sinceramente, de CFK y al tremendo éxito que tuvo. Muchos políticos suelen publicar libros y usarlos como instrumentos de campaña. Respecto a si mejoró la imagen de Macri, seguramente entre sus votantes habrá tenido un efecto positivo. Entre las personas que tienen una valoración negativa, no creo que hayan cambiado su opinión.

—Usted dijo que hay grabaciones con Mariano Macri que no publicó. ¿Cree que cambió de posición respecto a lo que contó para su libro por temor o por amor al ex presidente?

—Es la pregunta del millón, es muy buena tu pregunta. ¿Por qué cambió Mariano Macri? Por una parte, hay un relato que está claro y que está grabado, está probado. Y, aún así, de repente, hay un cambio. Pero no sé cómo funcionaron las presiones: si fueron presiones positivas o negativas, si lo amenazaron, si le ofrecieron un millón de dólares, si le dijeron que lo iban a comer crudo si no cambiaba, la verdad es que solo puedo especular. Lo único que sé es que existieron presiones para que Mariano Macri cambie su testimonio. Me parece que ahí hay otro libro a partir de su confesión: qué fue lo que lo llevó a cambiar su actitud y también cuál es la actitud que tiene ahora. No sé si se arrepintió, sinceramente lo digo. Cada vez me parece menos que se arrepintió. Puede haber también un grado de estrategia legal de Mariano. Quizá, la única manera que él tenía de contar lo que contó sin que lo compliquen económicamente, era a través de esta maniobra para no hacerse cargo de lo que dijo. No sé si fue por conveniencia, si es por necesidad legal, si es porque lo incentivaron, o si es porque lo asustaron. Me imagino que es una combinación compleja de todas estas cosas. También puede no haber querido lastimar a la madre. Muchas veces las explicaciones no son lineales.

Santiago O' Donnell en el Ciclo de Entrevista

—¿Está satisfecho por la repercusión que tuvo su libro en la opinión pública?

—Sí, estoy contento con el resultado. Me parece que, humildemente, es un aporte político y cultural. En cuanto al público, supongo que a algunos les gustó, a otros les pareció una porquería. Me parece que claramente tuvo un impacto político, por lo que me dijo mi editor, no recuerda ningún libro que haya tenido semejante impacto político, ni siquiera Robo para la Corona. Creo que un libro que entre directamente a la agenda política e impacte de la manera que impactó, no es algo habitual. Que obligue a Macri a dar una ronda de entrevistas para decir que era todo mentira, aunque no lo había leído. Que luego guarde silencio por varios meses para no tener que hablar del libro y que, finalmente, postergue por tres meses la salida de su propia autobiografía. Un libro que fue recogido por una carta de gobernadores peronistas en la que se lo enrostraron a Macri, creo que políticamente tuvo un impacto muy fuerte. Y creo que judicialmente, todavía va a dar mucho más. Quizás sí esperaba que haya más interés por parte de la Justicia, aunque el propio Mariano me había advertido que Mauricio Macri tenía mucha influencia en el Poder Judicial y eso iba un poco a silenciar el ruido que podría hacer el libro.

—Su padre fue Guillermo O’donnell, el mayor politólogo argentino, su tío es Pacho O’donnell, un destacado historiador y su hermana es María O’donnell, una conocida periodista. ¿Cómo influyó su entorno familiar en su carrera y cómo es la relación profesional con su hermana?

—Mi familia influyó en mi profesión, porque yo tenía cierta exigencia, no es una familia fácil. Casi todos los integrantes son muy destacados en lo que hacen, entonces uno tiene que tratar de tallar y estar a la altura. De chico, me acuerdo que elegí Periodismo como una decisión racional. No tenía que estudiar tanto, como Abogacía o Ingeniería, me sonaba divertido, me imaginaba con un chaleco caqui en la selva, cubriendo una guerra. Me parecía una aventura. Por otro lado, ese oficio tenía mucho prestigio en mi familia. A mi papá le parecía una profesión digna, respetaba esa profesión. Con respecto a María, siento cierta responsabilidad porque ella podría haber sido otra cosa, como mis otros hermanos, pero decidió ser como yo. Por otra parte, ella siempre fue muy generosa conmigo, sobre todo cuando volví de Estados Unidos, me ayudó a insertarme en el periodismo de la Argentina. En general, estamos muy de acuerdo en los grandes temas del periodismo y también en la forma de hacerlo.

Le agradecemos su participación en el Ciclo de Entrevistas organizado por estudiantes de Periodismo de Perfil y lo invitamos a realizar un comentario final para cerrar el reportaje.

Es muy lindo ver personas con este nivel de interés en el trabajo. El periodismo es un oficio que se aprende en la calle y haciéndolo. Yo creo que lo más importante de las escuelas de Periodismo son los contactos que uno hace y lo que se aprende de ciertos referentes. Yo también soy docente de Periodismo y siempre trato de decirle a mis alumnos que sean buenas personas, porque estamos en una era de transparencia en la que nuestra vida está totalmente a la vista y es de interés de todo el mundo. Me parece importante entender que ahora uno está mucho más expuesto a la mirada del otro. Ya no es más como antes, que nosotros mirábamos y nadie nos miraba. Ahora nosotros miramos y también nos miran y me parece muy importante dar un ejemplo y tratar de llevar una vida ética, porque no sólo vamos a ser juzgados por nuestro trabajo sino también por cómo vivimos día a día. Yo creo que hoy, un periodista que le pega a su mujer, o que denigra a una compañera en un programa de radio, deja de ser un periodista creíble y respetado. Entonces, sean buenas personas, sepan que no hay una diferencia entre una vida profesional y una vida personal, aprendan de la gente que sabe, tengan entusiasmo, tengan pasión y sobre todo crean en ustedes mismos. Porque otro de los grandes vicios de las escuelas de Periodismo, aunque sé que no es el caso de la Escuela de Perfil, es que puede haber muchos profesores que ya están de vuelta, están frustrados, entonces son muy cínicos y les van a decir que todo está mal, que no van a llegar a nada, que esta profesión ya se terminó, y todas las frustraciones personales de los propios docentes o de los propios editores, les llega a ustedes injustamente. Porque ustedes tienen por delante su propio camino.

Por Gabriela Egas, Nicolás González y Pablo Canales
Estudiantes de Periodismo de la
Escuela de Comunicación