Mauricio Macri inauguró este jueves el 136° período de sesiones ordinarias en el Congreso de la Nación con la misma vestimenta que lo caracteriza y que según siempre comenta Jaime Duran Barba, transmite transparencia y honestidad. Pero lo más curioso de la apertura fue en el camino hacia el recinto cuando se escucharon pequeños maullidos para recibir al mandatario, en alusión al famoso apodo "Macri gato".
La clásica camisa celeste con el saco azul acompañó al Presidente al igual que en las dos aperturas de sesiones anteriores -sólo cambió el formato de la corbata-. Lo imitaron el presidente de la Cámara baja Emilio Monzó (se encargó de llenar el vaso de agua del mandatario y se recibió como el aguatero oficial) y el presidente provisional del Senado Federico Pinedo, quienes lo acompañaron durante su discurso.
A diferencia del jefe de Gabinente, Marcos Peña, ninguno de los tres llevó escarapela, tampoco lo hizo la vicepresidenta Gabiela Michetti, quien se sentó a su izquierda. En Macri esto no es una sorpresa ya que en ninguna de las sesiones anteriores la utilizó.
El Presidente entró con la camisa abierta y corbata junto a Michetti y la primera que lo saludó fue la diputada Elisa Carrió, con quien mantuvo una reunión secreta ayer, y que más tarde quedaría retratada en ese inusual saludo al estilo militar mientras observaban y se reían Peña y Horacio Rosatti, uno de los cinco integrantes de la Corte Suprema de Justicia.
Las tres personalidades de la oposición que Macri decidió sentar en primera fila fueron los senadores peronistas, Rodlofo Urtubey, Miguel Ángel Pichetto y Adolfo Rodríguez Saa; los últimos dos se mantuvieron con una actitud muy distendida y algo charlatanes.
MIAU
El Presidente hizo su ingreso pasadas las 10.50, firmó los libros de actas de Diputados y del Senado y luego, en el camino hacia el recinto, se escucharon pequeños maullidos, de fuente desconocida, que trajeron a la mente de los presentes la denominación ya popular de "Macri Gato". Una vez adentro del recinto, fue recibido con intensos aplausos.
PRESENTES
Alli lo esperaba el Gabinete completo. Eduardo Duhalde, fue el único ex presidente que participó de la Asamblea, además de Adolfo Rodríguez Saá, que estuvo en su condición de senador por San Luis. Duhalde mantuvo una animada charla, durante toda la previa al discurso, con el titular de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, quien concurrió escoltado por otros integrantes del máximo tribunal como Elena Highton de Nolasco y Horacio Rosatti, entre otros.
AUSENTES
No estuvo ni Cristina Kirchner ni su hijo Máximo Kirchner, por razones que desde su propio bloque no quisieron precisar.
MANGA LARGA, FALDA CORTA
La gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal volvió a sorprender con su look. Esta vez lució un vestido con líneas geométricas en distintos colores que llamaron la atención en medio de los gobernadores que la rodeaban, en el sector izquierdo al presidente Mauricio Macri. Michetti eligió el blanco para la apertura de las sesiones mientras que Elisa Carrió mostró una túnica en tonos turquesa. La diputada de la Coalición Cívica fue una de las más habladoras durante la jornada. Compartió gran parte de la charla con su comprovinciana Alicia Terada pero también dialogó con varios de los integrantes de su bloque. Desde un palco, la miraba el nuevo funcionario de Jefatura de Gabinete, Fernando Sánchez, de su círculo íntimo.
Macri, por su parte, lució un traje azul con camisa celeste, emblema del PRO, y una corbata con pequeños cuadraditos celestes y azules. El primer botón de la camisa, desabrochado.
PAÑUELOS Y CARTELES
Como ya es habitual, el inicio del año legislativo sirvió como pantalla para que los legisladores llevaran sus demandas. Así, hubo pañuelos verdes en respaldo al aborto que lucieron, en su mayoría, las legisladoras que impulsan la campaña a favor. Entre ellas estuvieron Victoria Donda, Mónica Macha, Mayra Mendoza, además de otros diputados como Daniel Filmus y Roberto Salvarezza, del kirchnerismo. Por Cambiemos, el bonaerense Fabio Quetglas, radical aliado a Ernesto Sanz, también se animó a mostrar el pañuelo en su banca.
También se vieron carteles a favor del "Aborto Legal YA" y otros de la campaña "En INTI no sobra nadie", en alusión a los más de 250 despidos que se registraron a principios de este año en la dependencia.
EL BEBITO
En la previa a la Asamblea, referentes de la campaña en contra del aborto que se ilustra con un bebito de cera, se ubicaron a lo largo de la avenida Rivadavia junto a las vallas repartiendo volantes. "Tengo 6 semanas, tengo derecho a vivir", decía uno de los carteles en contra del aborto. Los militantes, entre ellos niños de menos de 10 años, tuvieron incluso un cruce con un defensor del aborto que les recriminaba "que se vayan a Recoleta, ahí donde abortan los ricos".
MUY BIEN!
Muy contento se lo vio al ministro de Ambiente Sergio Bergman cuando el Presidente anunció la creación de un Parque Nacional en un espacio cedido por Campo de Mayo, en el conurbano bonaerense. "Muy bien!", exclamó cuando fue enfocado por una de las cámaras que fue siguiendo el detalle de la Asamblea. Como el discurso del mandatario estaba escrito de antemano, la transmisión televisiva por el canal interno del Congreso iba mostrando a los referentes de cada tema que se iba mencionando. También tuvo protagonismo Adolfo Rubinstein, de Salud, cuando se trató el tema del aborto y Patricia Bullrich, en varias oportunidades que se trató el tema de seguridad.
Luis Caputo, el ministro de Finanzas acusado de vínculos con sociedades offshore, no tuvo la misma suerte y, sentado en un extremo del corralito de ministros, casi no fue enfocado por la transmisión oficial.
APLAUSOS
A Macri lo aplaudieron un total de 24 veces. Los puntos salientes del discurso del Presidente tuvieron aplausos de la mitad del recinto, perteneciente a Cambiemos, mientras los demás permanecían quietos siguiendo el mensaje. Pero hubo un momento que generó especial algarabía de los ministros del gabinete, cuando el mandatario se refirió a las paritarias docentes, hoy empantanadas en la mayoría de las provincias. También cosechó aplausos la referencia a la igualdad de género. "No podemos permitir que una mujer gane menos que un hombre", enfatizó Macri, mientras las cámaras enfocaban primero a Vidal y luego a la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, que también acompañaron con aplausos.
SÍ SE PUEDE
Con una mano en el corazón, Macri cerró su discurso con la ya tradicional frase de la campaña del 2015, y fue acompañado por referentes de su espacio, aunque tímidamente, entre aplausos y gritos que marcaron el final de su mensaje de 40 minutos.
FINAL
Sobre el final de su discurso largó una sonrisa de satisfacción, mostrándose contento con su performance, Salió caminando con tranquilidad acompañado de Michetti y Monzó, mientras que Pinedo venía detrás con mucha parsimonia: se desabrochó el saco e iba con las manos en los bolsillos. Para finalizar, se paró sobre la camioneta que lo iba a trasladar y saludó al poquísimo público que había en las afueras del Congreso.