La construcción de una carretera elevada en las afueras de El Cairo generó una profunda indignación en los vecinos que habitan en las viviendas adyacentes a esta carretera en Giza, una ciudad que pertenece al área metropolitana de la capital egipcia. Se trata de una estructura de hormigón que pasa a tan solo 50 centímetros de los edificios cuyos balcones y ventanas quedarán obstruídos por la autopista.
Este puente es parte de una obra de ingeniería que busca facilitar el tráfico de esta congestionada ciudad de cerca de 20 millones de habitantes y pretende conectar a los princiapales distritos de Giza. Se estima que el puente será utilizado por unos 750 mil vehículos diarios.
Sin embargo y a pesar de la efectividad que tendrá en la conexión del tráfico, los habitantes de los edificios más afectados ya comenzaron a elevar sus críticas hacia la obra. "Los residentes de estos edificios están preocupados por su privacidad así como por posibles accidentes de tránsito que tienen el potencial de poner en riesgo sus vidas", contó Mariam Rizk, periodista del Servicio Árabe de la BBC en El Cairo. "También se quejan de que la nueva estructura les bloqueará el aire y la luz del sol por completo", añadió. "Cuando pase un auto, quizás los podamos invitar a tomar un té en nuestro balcón", le dijo un residente a un periódico local.
Cuando se iniciaron las obras, las autoridades informaron a los residentes que el puente pasaría a unos cuatro o cinco metros de sus casas. Sin embargo, la evidencia muestra que esto no es así. Según le dijo el ministro de transporte, Kamel El-Wazir a una televisión local, un comité de ingenieros examinará la situación. El ministro señaló que una solución posible será ofrecerles a quienes no estén conformes con la obra, que se muden a otra zona más alejada de la autopista. Además, las autoridades indicaron que algunos de estos edificios podrían haber sido construídos sin cumplir con las normas, algo que los residentes niegan.
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"Yo compré este departamento en 2011. Está registrado con un número y una fecha y no está construido en contra de los códigos de edificación como dicen", dijo un residente que no quiso dar su nombre. "Mi casa se convirtió en una tumba. Se volvió oscura y ruidosa. Yo, como todos los demás, usé todos mis ahorros para comprarla", aseguró otro vecino.
Las autoridades señalaron de decidirán en breve cómo solucionar el problema, pero advirtieron que la carretera no puede modificarse ni hacerse más angosta. Se estima el puente -que se extiende por 12 km- estará terminado para fin de año.