El kirchnerismo busca capitalizar el impacto de la condena para consolidar el control del PJ

El sismo que provocó la confirmación por parte de la Corte Suprema de Justicia a la condena a Cristina Kirchner aplacó, solo momentáneamente, los tironeos internos y las disputas por el liderazgo del peronismo, cuando faltan semanas para el cierre de las listas a nivel bonaerense y meses para las elecciones de octubre.

El escenario es aprovechado por Cristina y su entorno para consolidar la “centralidad” de su figura, y de esa manera no solo encolumnar al peronismo sino también unificarlo bajo el liderazgo de la expresidenta.

La jugada apunta, entre otras cosas, a dejar aislado al gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, quien intentaba emanciparse de la jefatura política de Cristina, pero que ahora está obligado a recalcular su plan luego del cimbronazo que implicó la decisión del Máximo Tribunal. Es por eso que la interna peronista promete volver a recalentarse en las próximas semanas.

No bien conocida la sentencia de la Corte en el kirchnerismo hablaban sin ambigüedades: “Tenemos absoluta centralidad en la toma de decisiones electorales”. Por si quedaba alguna duda, ayer el senador Eduardo “Wado” de Pedro le envió un mensaje claro a Kicillof (ver recuadro ).

Ayer, el kirchnerismo dejó algo claro: la marcha prevista para el miércoles a Comodoro Py se hará, sea cual fuera la decisión del Tribunal Oral Federal 2 respecto de la prisión domiciliaria de Cristina. “Si alguien espera que la movilización se cancele, se equivoca”, advierten. “Vienen por ella, vamos con ella”, reza la convocatoria.

Cristina utiliza como plataforma la orgánica del PJ y por ello, activó rápidamente una agenda de reuniones: partidos políticos cercanos, organizaciones sociales, CGT, gobernadores. La titular del justicialismo no puede participar, pero tiene a sus emisarios: Máximo Kirchner, José Mayans y a Mayra Mendoza. Mañana, habrá una nueva actividad en el PJ Nacional encabezada por Máximo para conmemorar los 70 años de los bombarderos de la Plaza de Mayo. Ayer, se reunieron de forma presencial y virtual más de 250 intendentes de todo el país.

Hasta el momento, la agenda del PJ Nacional se extiende hasta el miércoles. Otro dato sobresaliente de ayer: hubo reuniones y encuentros en distintos puntos de la Ciudad con el objetivo de terminar confluyendo en San José 1111, la nueva Meca del peronismo.

Uno de esos fue el que encabezó Juan Grabois en Parque Lezama junto a Ofelia Fernández. A Grabois le bajaron el pulgar desde todos sectores con su propuesta de “abstención”. También hubo un encuentro en Parque Rivadavia y en otros puntos.

En esa línea, se promueve que la misma dinámica que tomó el PJ Nacional en los últimos días, manteniendo encuentros con dirigentes cercanos, organizaciones, sindicatos y centrales se replieque en distintos puntos del país. Siempre con el objetivo de dejar en claro la “persecución” y la “proscripción”.

También se espera que el martes en horas de la tarde noche se genere una vigilia para la marcha del miércoles, que será masiva, según los organizadores.

Con la misma velocidad con la que Kicillof queda raleado por el núcleo kirchnerista, crece la influencia del líder del Frente Renovador, Sergio Massa, quien mantiene equilibrio y cosecha buen vínculo con el líder de La Cámpora y con las distintas tribus del peronismo.

El jueves massistas y camporistas llegaron juntos luego de haber tenido una reunión en la previa en las oficinas del tigrense en la Avenida del Libertador.

En el peronismo nadie saldrá a disputar con Cristina en los primeros días tras la decisión de la Corte. Sin embargo, es claro que no son pocos los caciques territoriales que especulan y esperan que la espuma baje para hacer su propio juego.

El caso de Kicillof es el que encarna una mayor tensión latente. El espacio lanzado recientemente por el mandatario bonaerense, MDF, agrupa un nutrido grupo de intendentes de peso como el caso de Jorge Ferraresi, de Avellaneda, pero también dirigentes sindicales: Héctor Daer y Hugo Yasky estuvieron presentes en Los Hornos semanas atrás.

Cristina quiere retener la lapicera, pero la interna peronista volverá a tomar temperatura, porque el kirchnerismo no quiere perder el liderazgo, pero los intendentes y el axelismo tienen miedo a perder ante un escenario tan incierto.

Las advertencias de Wado

El senador nacional Eduardo “Wado” de Pedro lanzó ayer una contundente advertencia al próximo gobierno, al asegurar que la “primera condición” para su conformación será la libertad de Cristina Kirchner. La confirmación de la sentencia marcó un “punto de inflexión” en el peronismo, según De Pedro, quien se mostró activo en la organización de la campaña “Cristina libre”. También llamó a Axel Kicillof a “reflexionar” y no discutir por cargos en las listas. Por otra parte, el senador José Mayans también reclamó que el próximo gobierno tiene que dar “un indulto” a Cristina cuando asuma. “Dicen ‘esta mujer va a ganar, va a ser candidata a presidenta y se nos terminan los negocios’. Es eso lo que están haciendo los grupos económicos”, denunció el senador formoseño, quien quedó a cargo de la operatividad del PJ Nacional.