Abogado del ex contador de los Kirchner, arrepentido en Cuadernos: “Ningún empresario fue presionado”

Roberto Herrera, abogado del excontador de los Kirchner y arrepentido en la causa Cuadernos, aseguró que “ningún empresario fue presionado” y que su defendido, Víctor Manzanares, es “la persona que sabe todo” porque manejó “todas las finanzas” del entorno kirchnerista desde los años de Río Gallegos. En Modo Fontevecchia, por Net TV y Radio Perfil (AM 1190), el penalista aclaró que sus dichos sobre presuntas presiones fueron “sacados de contexto” y que Manzanares no recibió ningún trato privilegiado: “Muy lejos de eso, fue uno de los peores momentos que la pasó en estado de detención”. 

Roberto Herrera es abogado penalista, muy conocido por su participación en causas judiciales de alto perfil mediático. En la actualidad representa a Víctor Manzanares en la denominada causa de los cuadernos.

Usted tiene como defendido, me parece, al actor principal de lo que pudiera ser el hilo judicial, porque, al ser el contador de la familia Kirchner, evidentemente es quien tiene la construcción de prueba más importante de lo que haya sucedido. Y le quería comenzar preguntando si usted puede compartir con nuestra audiencia, para aclarar el revuelo que se armó cuando usted dijo y, como usted contó, fue malinterpretado y por momentos descontextualizado, que algunos de los arrepentidos habían sido, de alguna manera, presionados en exceso, más allá de lo que marca la ley.

La realidad es que fue sacado de contexto porque la expresidenta lo único que necesita es mantener el relato. El relato para la gente que todavía sigue creyendo en su inocencia y de que esto es una causa armada y por lo que fue. La verdad que sí, defiendo a Manzanares ya hace varios años. En el momento que yo entro a la defensa de él, pasaron unos meses y empezamos a evaluar la posibilidad de que él sea arrepentido en la causa Cuadernos, porque él era el que manejaba todas las finanzas de la parte del sur, en Río Gallegos, de Daniel Muñoz.

Lo que fue malinterpretado fue porque, a raíz de una respuesta que le di al periodista Nelson Castro en su programa, Manzanares había sido premiado por su arrepentimiento. Yo lo que dije es que, muy lejos de eso, fue uno de los peores momentos que la pasó en estado de detención. Manzanares ya había sido arrepentido, ya estaba homologado el acuerdo. ¿Esto qué significa? Que Manzanares no podía seguir declarando en la causa.

Cuando lo pasan a este lugar de detención, no había más nada para hacer con Manzanares respecto a ahora, cuando venga el juicio. Esa es la cosa. Pero no que lo estaban torturando o premiando por lo que él había dicho. Yo lo que dije es porque el Mena, el ministro de Justicia de la provincia de Buenos Aires, había dicho que había sido beneficiado y que salió el mismo día. Un disparate. Que un ministro de Justicia diga lo que dijo es totalmente desconocer los hechos.

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¿Es cierto que Manzanares podría llegar a tener temor de salir de la cárcel, o temor si algún día sale?

No, Manzanares está excarcelado. Y Manzanares salió después de su arrepentimiento. Habían pasado dos meses, más o menos. Lo tuve que convencer porque no quería que yo presentara la excarcelación, porque decía que él tenía que pagar la culpa de lo que hizo por lavar plata y por meterse en algo turbio que no tenía ninguna necesidad de hacerlo. Es una persona muy creyente y sí, temor tiene y tuvo. Esa es la realidad, porque acá estas hablando con gente muy poderosa. He sido amenazado, me han disparado en el auto.

Hemos pasado situaciones que, hoy, las miro a la distancia, porque en ese momento uno se olvida, pues ya pasaron varios años desde el momento que Manzanares se arrepintió, pero la verdad que la pasamos bastante complicadas las cosas, en situaciones que nos seguían con los autos, y Manzanares también, por supuesto. Entonces, la realidad es que fueron momentos muy difíciles para nosotros. Nunca nos esquivamos nada, seguimos para adelante con todo. Manzanares es una persona que tiene muchísimas pruebas todavía. Manzanares fue el contador de ellos desde que Néstor Kirchner fue intendente en Río Gallegos. O sea, es la persona que sabe todo.

Me gustaría que usted pusiera un poquito en contexto a la audiencia la relación de Manzanares con el kirchnerismo.

Manzanares se recibe de contador en Río Gallegos. Era conocido de Néstor Kirchner porque Néstor Kirchner trabajaba para el papá de Manzanares en una agencia de autos muy importante. Entonces, cuando él entra en la función pública, Néstor Kirchner lo convoca a Manzanares porque es una persona muy inteligente y con una memoria que no he visto nunca. Él te puede decir los juicios de cualquiera de los clientes que tuvo, y tenía una cartera de más de 500 clientes. Entonces, tenía una memoria que a nosotros llamaba la atención. Por eso lo convoca, y se lo conocen desde muy jóvenes. Bueno, esa fue la relación que tenía con el kirchnerismo. De Néstor, de Cristina, el contador de ellos. Y también deja de ser contador de ellos en el momento que fue detenido. Pero la verdad es que a Daniel Muñoz también lo conocía, porque Daniel Muñoz también había sido empleado en la agencia de autos del papá, en la parte de repuestos. 

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O sea que tanto Néstor Kirchner como Muñoz habían sido empleados de la empresa de autos del papá de Manzanares.

Así es.

¿El papá de Manzanares falleció o sigue con vida?

Falleció hace muchos años. Pero el padre, de hecho, había tenido una discusión muy grande cuando Manzanares le dice al padre que lo había llamado Néstor y que iba a ser el contador de ellos, porque justo había entrado en la función pública, como intendente en Río Gallegos. El padre le dice: “Esta gente te va a arruinar la vida, es el camino que estás eligiendo y te estás equivocando”. Es una de las frases que dice dentro de su declaración como arrepentido. O sea, lo conoce desde muy jóvenes, a todos, la mayoría de las grandes personas que son funcionarios del kirchnerismo. Porque la gran mayoría son gente que viene con ellos de Río Gallegos, tanto Julio De Vido como Jaime, mucha gente de los que trabajaban dentro del gobierno de Néstor Kirchner y de Cristina, y Manzanares los conoce a todos.

Cuando usted dice que Manzanares decía que estaba arrepentido porque, además de lo que había hecho, no tenía ninguna necesidad de hacerlo, intuyo que es porque el papá de Manzanares le había dejado un patrimonio con esa empresa importante que tenía y, por lo tanto, él no necesitaba maximizar su beneficio económico. ¿Entiendo bien?

Exactamente. Y no solo eso, sino que él ya tenía un nombre en Río Gallegos, era uno de los contadores más importantes que había en Río Gallegos. Tenía una cartera de más de 500 clientes, tenía empresas petroleras. Lo que pasa es que a él le daba mucho prestigio ser el contador de los presidentes. Esa situación a él le daba mucha visibilidad también entre los de Río Gallegos, que si bien Río Gallegos es chico, pero muchas empresas que son por petróleo o de campos, por el tema de las ovejas. Entonces, todo eso era el contador Manzanares. Entonces, él no necesitaba meterse en nada. Económicamente, digamos.

Daniel Muñoz era un empleado normal, un empleado que llegó a manejar Manzanares. En su declaración, y se le encontraron casi 1.000 millones de dólares a Daniel Muñoz. Propiedades y sociedades que no estaban en el radar de la Justicia. Quien informa todo esto es Manzanares, pero no solamente por dichos, sino con documentación, porque Manzanares era uno de los que organizaba esa parte.

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¿Cómo imagina que va a evolucionar el juicio de Cuadernos y si usted encuentra algún punto de contacto con lo que fue el Lava Jato?

Son causas muy similares. Lo que sí veo es que esto va a terminar con una condena seguro. Entiendo que no puede pasar otra cosa. Más allá de todas las causas de corrupción que existen en el país, esta es la más importante, primero por la cantidad de implicados que tiene, tanto del empresariado como del lado político, que son gente que, de los dos lados, tomaron la decisión de arrepentirse.

Más allá de lo que dijeron muchos de los empresarios que después se arrepintieron, como que los habían obligado… Entiendo que es una cuestión personal de cada uno del que dijo eso. Muy lejos de eso, ninguno de los empresarios fue presionado por nadie, porque la realidad es que quien conoce cómo es este sistema del arrepentimiento en una causa, el que va a proponer a la fiscalía la situación de entrar como imputado colaborador es el propio defensor del imputado. Cuando Manzanares decide ser arrepentido, el que se acerca a la fiscalía soy yo. A mí la fiscalía no me viene a buscar para que Manzanares sea arrepentido.

Y lo mismo pasó con los empresarios. Después, Cuneo Libarona, en una entrevista había manifestado que él le había dicho a un empresario que tenía que mentir para poder zafar de la cárcel. Yo no vi la entrevista, me la comentaron. Me parece una locura igual, porque la realidad es que justamente lo que dice la Ley del Arrepentido es que si un imputado colaborador miente en su declaración, lejos de tener un beneficio en la condena, como prevé la ley, se aumenta la pena. Entonces, yo como abogado jamás le diría a un cliente: “Mentí por acá para poder zafar de la cárcel”, porque después va a ir preso él. En el juicio, no me había dicho preso.

RM/ff