Quizás no se ha dado cuenta, pero cada vez nos parecemos más a Suiza. Falta poco para que usemos sombreritos tiroleses y deambulemos por la calle luciendo pantaloncitos con tiradores floreados. La lógica nos hace pensar que si pagamos más impuestos que Suiza, en algo debemos parecernos. Resulta que en esta Argentina progresista, la recaudación impositiva asciende al 32% del PBI, mientras que en el país de Guillermo Tell llega al 30,3%.
Visto y considerando, deberíamos estar mejor que en Suiza. ¿Acaso usted no lo nota? En estas pampas, hace diez años estos guarismos andaban por el 22,4% del PBI. Este aumento del 40% nos ubica entre los 15 países que más presión impositiva ejercen sobre sus contribuyentes. Los diez puntos de aumento se deben en gran medida a imposiciones circunstanciales que han perdurado en el tiempo, léase el impuesto al cheque y las retenciones al agro que, dicho sea de paso, se acercan a los cánones que produjeron las revueltas de los sans-coulottes en los días previos a la Revolución Francesa.
Debemos agregar el impuesto inflacionario y la imposibilidad de actualizar nuestras declaraciones con las correcciones del caso. Menos aún lo que pagamos como adelanto.
Ahora, ¿alguno de ustedes cree que el próximo gobierno, sea del partido que fuera, va a poder bajar las retenciones? El feroz gasto público (168 mil millones de dólares) y la telaraña de subsidios hará imposible o muy traumático cualquier cambio. ¿Usted se imagina a la gente oblando sin chistar $ 4 el boleto de colectivo? Nadie va a estar dispuesto a pagar el costo social del sinceramiento. Esta presión impositiva ha llegado para quedarse mientras persista el derroche oficial, circunstancia que parece no tener fin. Dadas estas razones, vamos a seguir en un país parecido al de Heidi, en su versión latinoamericana, con la dulce niñita pasada de paco, bailando al son de una cumbia villera mientras acompaña a su abuelito al PAMI para recibir remedios truchos y vigila al cabrito para que no se lo roben y termine al asador.
¡Yolelei, yolelei, ju ju!
*Médico y escritor.